De Víctor de Aldama se sabe que actuó como comisionista en la trama de adjudicaciones ilegales protagonizada por Santos Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García; se sabe también que ha decidido colaborar con la Fiscalía para atenuar su inevitable condena; y se sabe, además, que lo que denuncia desde que tomó el camino de cooperar se va demostrando.
Fue el primero, por ejemplo, en señalar ante juez a Santos Cerdán dentro de la trama al desvelar que había “un cupo vasco” reservado para él —hasta entonces, no estaba bajo la lupa al estallar el “caso Koldo”— . El informe de la UCO de la Guardia Civil ha demostrado que, en efecto, el recién dimitido secretario de Organización de l PSOE era una pieza clave en el amaño de adjudicaciones públicas.
En una de las últimas declaraciones de Víctor de Aldama, posteriores a que Pedro Sánchez anunciara su intención de encargar una auditoría sobre las cuentas del PSOE, el comisionista confeso dijo: “A mí Koldo me decía que parte del dinero que yo entregaba iba era para el partido, para la financiación del partido, y —que yo sepa— siendo dinero B eso es financiación ilegal”.
Y ese es uno de los puntos que más atención centra ahora, particularmente después de quedar en evidencia en el informe de la UCO que figuras tan relevantes como Ábalos y Cerdán (ambos ocuparon la secretaría de Organización del PSOE) se valieron de su peso político para obtener contraprestaciones económicas. ¿Solo para ellos o también para el partido?
El rastro de Ana Fuentes
Cerdán se convirtió en secretario de Organización del PSOE en julio de 2021 sustituyendo a Ábalos. Al cabo de poco, y prácticamente por sorpresa, realizó un cambio en la gerencia del partido al relevar a Mariano Moreno por Ana Fuentes. De ella también hay rastro en la investigación de la Guardia Civil, puesto que Koldo se refirió a ella después de uno de sus encuentros con Cerdán (15 de marzo de 2022) en el que pedía al número tres del PSOE que se hiciera con el cobro de 150.000 euros que se le adeudaba a la trama con la idea de repartírselos con Ábalos.
Unas semanas después de la citada reunión, Koldo contactó con otra de las figuras claves de la trama (aunque con menos repercusión mediática): el director general de Carreteras del Ministerio de Transportes, Javier Herrero, que mantuvo este cargo entre junio 2018 y octubre de 2022. En concreto, se dirigió a él por whatsapp para avisarle de que le habían pedido su teléfono desde la Gerencia del PSOE (asumida por Ana Fuentes —de la confianza de Cerdán—), ya que, según creía le iban a pedir “el impuesto”.
Bingo en Logroño, bingo en Asturias
Herrero era clave desde su puesto para cerrar las adjudicaciones de obras que interesaban a la trama y envió varios mensajes (“Bingo en Logroño”, “Bingo en Asturias”) a Koldo cuando se consumaban sus planes. De hecho, Cerdán se mostró preocupado por la destitución de Herrero en Carreteras porque podía “contar lo que hay”.
De aquí surgen una parte de las sospechas sobre la financiación ilegal del PSOE, extremo que la dirección del partido niega. Su secretario general, Pedro Sánchez, ha anunciado que encargará una auditoría externa sobre las cuentas de su partido en aras de la transparencia (lo mismo hizo Mariano Rajoy tras el estallido de la Gürtel). Y el secretario general del PSOE-M y ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López, dijo que “el impuesto” puede ser la “cuota voluntaria” que los cargos públicos pagan al partido.