El FC Barcelona atraviesa un momento delicado. Una alarmante oleada de lesiones ha minado la plantilla más de lo previsto: hasta diez jugadoras han pasado por la enfermería en poco más de tres meses.
El club, ante esta situación, ya habría comenzado a valorar seriamente asomarse al mercado de fichajes invernal con el objetivo de reforzar el equipo y recuperar el nivel competitivo necesario para aspirar en lo que resta de la temporada.
Las consecuencias son visibles. En el último partido ante el Costa Edeje Tenerife, por la jornada 13, el Barça sólo pudo alinear 14 jugadoras del primer equipo.
Entre las bajas más destacadas figuran Aitana Bonmatí (fractura de peroné), Ona Batlle —otra vez tocada tras el parón internacional con España—, así como Salma Paralluelo, Kika Nazareth, Patri Guijarro y Esmee Brugts (recuperándose para el último partido disputado).
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— FC Barcelona Femení (@FCBfemeni) December 6, 2025
A pesar de las bajas, el entrenador Pere Romeu, alineó a jugadoras canteranas que en comparación con las titulares habituales, no suelen tener tantos minutos. Entre ellas están Aïcha Cámara (18 años y recambio generacional de Ona Batlle), Clara Serrajordi (18 años y recambio de Patri).
Está plaga de lesiones, tensiona físicamente al resto del grupo, sobrecargando a quienes quedan disponibles y poniendo en riesgo la competitividad azulgrana en las cuatro competiciones que afronta esta temporada, Liga local, UEFA Women’s Champions League, Copa de la Reina y Supercopa.
El mercado de invierno como una oportunidad
Aunque en verano el club priorizó retener a las estrellas sacrificando profundidad en la plantilla, ahora el la situación ha cambiado. Las lesiones recurrentes, sumado a las competencias que le toca disputar esta temporada, más los compromisos internacionales de algunas futbolistas con su selección, podrían forzar al Barça a reconsiderar su estrategia.
Así, el mercado de invierno se perfila como la ventana ideal para que el club dé un paso al frente: reforzar posiciones clave, incorporar jugadoras de calidad que puedan aportar consistencia y aliviar la carga de minutos que han crucificado este final de año para el FC Barcelona.
Estas incorporaciones no solo servirían para cubrir bajas temporales, sino también para asegurar profundidad en la plantilla de cara a lo que resta de temporada.
No se trata de fichar por fichar ahora que se avecina una nueva ventana, sino, adquirir de forma definitiva o cesiones a jugadoras de buen presente para suplir las bajas más importantes dentro de un equipo que está acostumbrado a pelear por todas las competiciones año por año.
Retornar al trono europeo
El Barça, club dominador en su liga local y a nivel internacional, cuenta con ausencias que le tienen obligado a subir a jugar a jugadoras jóvenes de la cantera, para que así, tengan oportunidades en el primer equipo.
Pero con la duda, de si están preparadas para afrontar el nivel exigido para competir al máximo nivel en la Champions, es el principal reto de la entidad blaugrana tras haber logrado llegar a la final la pasada temporada pero sin recompensa tras perderla.
La solución más fácil es la de salir al mercado invernal, y de esa manera, recuperar equilibrio, y más alternativas en defensa y ataque.
Lo que comenzó como un plan de austeridad en verano —priorizando estrellas por encima del fondo de armario como una situación que le está tocando vivir en pleno inicio de temporada.
Ahora el club catalán, mira al mercado invernal con la esperanza de reconstruirse, reforzarse y volver a reinar en Europa.