El Real Monasterio de Santa María de Veruela, ubicado a los pies del Moncayo en la provincia de Zaragoza, es mucho más que un testigo silencioso del paso del tiempo. Fundado en el siglo XIII por monjes cistercienses, este conjunto monumental ha sobrevivido a guerras, desamortizaciones e incluso terremotos, consolidándose como uno de los mayores referentes del patrimonio histórico y espiritual de Aragón. Desde 1991, está declarado Bien de Interés Cultural, reforzando su importancia dentro del legado arquitectónico y religioso español.
Un origen marcado por la espiritualidad y el rigor cisterciense
El monasterio fue fundado en 1145, aunque su construcción principal no se completó hasta el siglo XIII. Fue el primero de la Orden del Císter en establecerse en el Reino de Aragón, en un momento en que esta congregación impulsaba una arquitectura austera pero monumental, orientada al recogimiento y la contemplación.
Situado en el término municipal de Vera de Moncayo, el enclave no fue elegido al azar: la cercanía del Moncayo no solo ofrecía agua y recursos naturales, sino también aislamiento, un valor central para los monjes. El monasterio pronto se convirtió en un centro religioso, agrícola y cultural de primer orden en la región.
Un conjunto arquitectónico excepcional
El Real Monasterio de Santa María de Veruela es uno de los mejores ejemplos del románico de transición al gótico. Su estructura abarca una iglesia abacial, un claustro gótico, las dependencias monásticas y otras edificaciones añadidas posteriormente, como el palacio abacial y varias hospederías.
@arteviajero El #Monasterio de Santa María de Veruela es un maravilloso conjunto arquitectónico que se alza en un lugar idílico, y al mismo tiempo estratégico, a los pies del monte Moncayo. El #claustro es de notable interés, está formado por dos niveles, el inferior fue realizado en estilo #gótico y el superior corresponde al período renacentista, llama la atención el lavatorio que tiene forma de templete hexagonal. #arteviajero #aprendeentiktok #historiadelarte #tiktokcultural #viajestiktok #traveltiktok
♬ Background. Cinematic music.Flowers breathe. (Piano, violin) – AlexVoron
Entre sus joyas destaca el claustro del siglo XIV, con bellos capiteles vegetales y geométricos, que invitan al paseo silencioso y la reflexión. La iglesia, de planta de cruz latina y con una impresionante nave central, impone con su sobriedad y verticalidad. En el altar mayor se conserva un retablo barroco, testimonio de las remodelaciones que sufrió a lo largo de los siglos.
Resistencia frente a la historia: guerras y desamortización
El monasterio no ha estado ajeno a los grandes conflictos de la historia. Durante la Guerra de la Independencia fue ocupado por tropas francesas, que lo saquearon y causaron graves daños. Más tarde, en el siglo XIX, la desamortización de Mendizábal forzó la exclaustración de los monjes y el cierre temporal del recinto.
Pese a estos embates, Veruela resistió. Fue restaurado en varias fases y reabierto en el siglo XX gracias al esfuerzo institucional por conservar el patrimonio eclesiástico y civil del país. Desde 1991, su declaración como Bien de Interés Cultural ha permitido nuevas intervenciones de conservación.
@turismodearagon El Real Monasterio de Santa María de Veruela es una abadía cisterciense del siglo XII, ubicada cerca de Vera de Moncayo, en Tarazona. El edificio presenta una mezcla de estilos artísticos, desde el Románico en la portada de la iglesia abacial, pasando por el Gótico en el interior y el claustro medieval, el Renacimiento en las reformas realizadas por Hernando de Aragón y el Barroco en la portada de la sacristía y del monasterio nuevo. #turismodearagon #turismoaragon #aragon #monasteriodeveruela
Un refugio para artistas y escritores
El monasterio no solo fue refugio de monjes: también lo fue de artistas y literatos. El poeta Gustavo Adolfo Bécquer y su hermano Valeriano vivieron una temporada en Veruela en 1864, buscando un entorno saludable para combatir la tuberculosis que aquejaba al escritor. Fruto de esa estancia nacieron las famosas “Cartas desde mi celda”, una serie de reflexiones y relatos inspirados en el paisaje y la atmósfera del monasterio.
Este vínculo con los Bécquer ha convertido al recinto en un lugar de peregrinación literaria, y hoy en día cuenta con un espacio expositivo dedicado a su legado.
Veruela hoy: cultura, vino y espiritualidad
Actualmente, el Real Monasterio de Veruela se ha convertido en un centro cultural vivo. Alberga exposiciones temporales, actividades artísticas, visitas guiadas y eventos musicales. También acoge el Museo del Vino de la D.O. Campo de Borja, lo que subraya su conexión histórica con la viticultura: los monjes ya producían vino en sus bodegas desde tiempos medievales.
Abierto al público todo el año, Veruela es hoy un símbolo de resiliencia patrimonial y espiritualidad, una joya del medievo que sigue latiendo con fuerza en el presente. Su entorno natural, en el corazón del Parque Natural del Moncayo, hace de cada visita una experiencia cultural y sensorial única.