La publicación de documentos judiciales relacionados con el caso Epstein agitó los cimientos de la política y la élite internacional a principios de 2024. Aunque gran parte del contenido no arroja nuevas acusaciones formales, sí reabre la conversación pública sobre las conexiones del financiero con personajes tan influyentes como Bill Clinton, el príncipe Andrés o incluso Donald Trump.
Este último se ha visto de nuevo envuelto en la polémica tras las recientes declaraciones de Elon Musk, quien ha afirmado que el presidente bloqueó la publicación de ciertos archivos vinculados a este escándalo global.
Los documentos judiciales sacan a la luz nombres conocidos
El caso Epstein sigue generando titulares. En particular, con la publicación de cerca de 900 páginas procedentes del proceso contra Ghislaine Maxwell, expareja del magnate y actualmente condenada a 20 años de prisión por su implicación en una red de abuso sexual a menores. Entre los nombres que aparecen en los registros figuran el del príncipe Andrés, Bill Clinton, Michael Jackson y David Copperfield. Sin embargo, no todos están asociados a comportamientos delictivos.
La mención de Donald Trump dentro de estos documentos del caso Epstein no implica ningún tipo de acusación. Pero sí confirma una relación social entre el presidente y el entorno de Epstein. Sjoberg, una de las testigos clave, asegura que Epstein mencionó a Trump en una conversación relacionada con un viaje a Atlantic City, aunque sin que existiera contacto directo en ese momento.
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— Elon Musk (@elonmusk) June 5, 2025
La tensión ha aumentado tras las recientes declaraciones de Elon Musk, quien afirmó en redes sociales que el gobierno de Trump no publicó información comprometedora del caso Epstein por temor a que involucrara al propio presidente. Aunque no presentó pruebas directas, sus palabras han generado una ola de especulaciones sobre la posible implicación indirecta de Trump en el encubrimiento del escándalo.
El caso Epstein, por tanto, vuelve a situarse en el centro del debate político estadounidense. Las declaraciones de Musk llegan en un momento clave, cuando la figura de Trump ya se encuentra bajo el escrutinio de múltiples investigaciones judiciales. Y justo después de que el dueño de Tesla haya roto relaciones diplomáticas con la Administración Trump.
Clinton y el príncipe Andrés, en el foco de las sospechas
Aunque Donald Trump aparece de forma secundaria, el caso Epstein sigue afectando directamente a otras figuras prominentes. El príncipe Andrés enfrenta acusaciones explícitas por parte de Johanna Sjoberg y Virginia Giuffre, quienes lo señalan como agresor en al menos un encuentro ocurrido en la residencia de Epstein en Manhattan. A pesar de que el duque de York ha negado todas las acusaciones, en 2022 llegó a un acuerdo millonario extrajudicial con Giuffre.
En cuanto a Bill Clinton, los documentos confirman que viajó en varias ocasiones en el jet privado de Epstein. Aunque no se le vincula con ninguna conducta delictiva. Según la testigo Sjoberg, Epstein le habría dicho que a Clinton “le gustaban las jóvenes”. Una frase que ha generado controversia dada la historia personal del expresidente.
El caso Epstein ha puesto de manifiesto cómo el financiero mantenía relaciones con algunas de las figuras más poderosas del mundo. Si bien no todos los nombres mencionados en los documentos están implicados en crímenes, su cercanía al entorno de Epstein plantea serias preguntas sobre la permisividad de ciertos círculos de poder ante comportamientos inaceptables.
Donald Trump, pese a no haber sido acusado de nada en relación directa con el caso Epstein, es mencionado por testigos como parte del círculo social que rodeaba al magnate. Su nombre aparece en testimonios, como el de Sjoberg, quien asegura que Epstein pensaba llamarlo durante un vuelo a Atlantic City. Sin embargo, no hay constancia de encuentros ni de acciones reprochables vinculadas a esa supuesta interacción.
Los silencios que alimentan el escándalo del caso Epstein
Una parte de la controversia del caso Epstein reside en los silencios institucionales. Las críticas contra el FBI, la Casa Blanca y otras agencias por su falta de transparencia han sido constantes desde la muerte del financiero en 2019, que fue considerada un suicidio por el forense oficial.
El testimonio de empleados como Alfredo Rodríguez, encargado de la seguridad de Epstein, sugiere una red estructurada en la que Maxwell, hija del magnate editorial Robert Maxwell, desempeñaba un papel clave como “la jefa”. La falta de explicaciones claras sobre por qué ciertos documentos siguen ocultos o por qué algunas investigaciones quedaron paralizadas alimenta la sensación de impunidad que ha envuelto al caso Epstein desde sus inicios.