El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este lunes un paquete de nueve medidas contra Israel con el objetivo de frenar lo que calificó como “genocidio en Gaza” y el “exterminio de un pueblo indefenso”.
Las medidas llegan tras semanas de presión política y social por la escalada de violencia en la Franja, donde según datos oficiales ya han muerto más de 64.000 gazatíes —muchos de ellos niños— a consecuencia de los bombardeos israelíes.
El Ejecutivo, que ha trabajado en estas medidas de manera conjunta con Sumar, busca dar una respuesta clara desde España y elevar la presión internacional contra Israel. El propio Sánchez recordó que “España no tiene bombas nucleares, ni portaviones, ni grandes reservas de petróleo”, pero sí puede actuar desde el terreno diplomático, económico y político.
La aprobación inmediata de la Ley de embargo de armas
La primera de las medidas contra Israel anunciadas por Sánchez es la aprobación inmediata de la Ley de embargo de armas que ya tramita el Congreso.
El presidente defendió que no se puede permitir que armamento fabricado o comercializado en España termine siendo utilizado en Gaza.
Esta medida responde a una reclamación que diversas organizaciones de derechos humanos venían planteando desde hace meses y que ahora se convierte en la punta de lanza del plan del Ejecutivo.
Prohibición de entrada en España a responsables del genocidio
Otra de las medidas contra Israel tiene que ver con la prohibición de entrada en territorio español a aquellas personas vinculadas directamente con la planificación, ejecución o justificación del genocidio en Gaza.
Se trata de un paso inédito en la política exterior española, que busca dejar claro que el país no será refugio de responsables políticos o militares israelíes.
El Gobierno explicó que la medida se aplicará de manera inmediata y que la lista de afectados podrá ir ampliándose en función de las investigaciones internacionales en curso.
Puertos y aeropuertos españoles cerrados al tránsito de armas
Sánchez también anunció que entre las medidas contra Israel figura impedir el uso de aeropuertos y puertos españoles para el tránsito de armas con origen o destino en el Estado hebreo.
Con ello, España refuerza su postura de no contribuir de forma indirecta al conflicto.
Según el Ejecutivo, esta restricción tiene como objetivo evitar que España se convierta en una plataforma logística para operaciones militares que agraven la crisis humanitaria en Gaza.
Veto a la importación de productos de asentamientos israelíes
Una de las decisiones más simbólicas dentro de las medidas contra Israel es la prohibición de importar productos procedentes de los asentamientos israelíes en territorios ocupados.
Esta medida se alinea con la postura de la Unión Europea, que desde hace años cuestiona la legalidad de dichas colonias y exige un trato diferenciado a sus productos.
Con este veto, el Gobierno español busca lanzar un mensaje claro contra la ocupación y presionar económicamente a los asentamientos ilegales.
Refuerzo de la ayuda humanitaria a Gaza
Dentro de las medidas contra Israel, Sánchez también anunció un incremento significativo en la ayuda humanitaria destinada a Gaza.
El Ejecutivo pretende canalizar más recursos hacia el apoyo de hospitales, escuelas y programas de emergencia en la Franja.
Este aumento de la ayuda se suma a las partidas ya enviadas en los últimos meses y busca paliar la dramática situación de la población civil, que sufre desabastecimiento de alimentos, medicinas y energía.
Más financiación para la UNRWA
El paquete de medidas contra Israel incluye igualmente el refuerzo de la financiación española a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
Sánchez subrayó la importancia de mantener vivo el trabajo de esta organización, que ha sido esencial en la asistencia a millones de palestinos durante décadas.
España incrementará sus aportaciones de manera inmediata, en coordinación con otros países europeos que ya han anunciado pasos similares.