Era la crónica de una muerte anunciada. Més, el partido mayoritario de Compromís (2 escaños), rompe en dos pedazos la coalición valencianista en el Congreso y abandonará el grupo parlamentario de Yolanda Díaz. El grupo plurinacional Sumar pasará de los 27 a los 26 diputados, perdiendo otro voto -los 4 parlamentarios de Podemos también salieron del grupo-, y fragilizando aún más a la débil mayoría que sostiene al Gobierno.
El Consell Nacional de Més ha aprobado este lunes con un abrumador 92,68% de los votos que su diputada Àgueda Micó, actual portavoz adjunta del grupo plurinacional, pase al Grupo Mixto en el Congreso. Se trata de una consulta vinculante, explican fuentes de la formación valencianista, que aún debe encontrar una fórmula y unos plazos para materializarse.
La decisión, además, supone un peligroso precedente: el diputado de Més per Mallorca, Vicenç Vidal, también ha dejado en el aire su permanencia en el grupo. Y el diputado de la Chunta Aragonesista, Jorge Pueyo, ha hecho lo propio. En el caso del primero, se espera que su partido decida el jueves, mientras que el segundo aún no ha detallado plazos.
Además del daño a la precaria mayoría parlamentaria de Pedro Sánchez, nuevas escisiones contribuirían a que cale la sensación de fin de ciclo o de agotamiento de proyecto, como reconoce una diputada. No es sólo perder uno o dos votos, es visibilizar la desintegración del proyecto con el que concurrieron a las elecciones generales hace menos de dos años, que sigue en caída libre en las encuestas.
El otro diputado, Alberto Ibáñez, seguirá en Sumar
Las diferencias sobre la comisión de investigación sobre la DANA que asoló la Comunidad Valenciana marcaron un antes y un después, y las investigaciones sobre la corrupción que salpica al PSOE (caso Koldo) han terminado de decantar la balanza. Movimiento Sumar, Comunes, Más Madrid e IU tienen ministros en el Ejecutivo, pero Compromís siempre ha optado por no participar en el Gobierno.
La relación con la cúpula de Díaz se ha ido resintiendo en los últimos meses, si bien el segundo partido de la coalición Compromís, Iniciativa, sí ha apostado por permanecer dentro del grupo. Es la fórmula que ha defendido hasta ahora su diputado, Alberto Ibáñez.
En un comunicado, su formación defiende que Ibáñez se mantendrá en Sumar: “No es el momento de empequeñecer espacios ni de patriotismo de las siglas, sino de ampliar alianzas plurales del conjunto de las izquierdas para aportar esperanza, seguridad y ética al complejo momento que vivimos”, reclama el texto.
El órgano que ha tomado la decisión, el Consell Nacional de Més, representa a la cúpula de la militancia del partido, y ha participado masivamente en esta consulta -más de un 88%-. De las 205 que integran este órgano, 190 han apoyado el planteamiento de la Ejecutiva del partido.
Según la propia pregunta, consideran que escindirse es la mejor forma de defender los intereses de los valencianos y fiscalizar al Gobierno, “especialmente en el contexto de corrupción dentro del PSOE” por el ‘caso Koldo’, informa la coalición.
Sumar promete seguir “buscando el acuerdo con Compromís”
En las últimas semanas, desde Sumar han vendido su esfuerzo negociador, y algunos dirigentes han mostrado su convicción de que, finalmente, el partido mayoritario de Compromís no optaría por la ruptura. Si entre los valencianistas hay quienes veían la relación insalvable, en Sumar cada vez han tenido más claro que sus aliados iban “por libre”.
En un breve comunicado difundido a última hora de la tarde, el grupo de Yolanda Díaz expresa su disposición a seguir “buscando el acuerdo con Compromís para garantizar su presencia y su autonomía en el seno del grupo parlamentario plurinacional de Sumar”. También a defender la agenda Valenciana.