24 meses. Fue el tiempo que Claudia Pina y la Selección se echaron de menos. Un periodo en el que la de Moncada peleó por defender mejoras y un avance real en el fútbol femenino de la RFEF junto con otras compañeras. Y que concluyó a finales de 2024 con su regreso esperado a La Roja.
Entonces, se puso fin a dos años en los que la delantera se preparó para todo lo que ha venido después. Sin todo lo que ocurrió entonces sería imposible entender la sonrisa y gran celebración de la jugadora del Barça tras ganar la Women’s Nations League con España.
Pina fue la gran estrella de la vuelta de la final del torneo europeo ante Alemania. Un triunfo que llegó por todo lo alto en un Metropolitano de récord: 55.843 espectadores y un ambientazo. El partido perfecto para todos y todas. Más aún para la delantera de Moncada, que anotó un doblete y se llevó el MVP.
El primer título que se le resistió a Pina
“Cada día nos apoya más gente, cada vez trabajamos más para poder ser mejores. Me hace especial ilusión porque es mi primer título con la Selección. Ahora, a celebrarlo. Es una locura la gente”, afirmó la futbolista del Barça tras el pitido final en los micrófonos de RTVE.
Minutos después, Pina apareció en zona mixta mojada y con una sonrisa inevitable. Había estado celebrando con sus compañeras en vestuarios, pero quiso acudir también a la llamada de todos los periodistas que esperaban hablar con la MVP. “Estoy muy feliz de ganar mi primer título aquí”, insistió.
De lo primero, ella mismo explicó el origen. “No ha habido ni una que no se haya metido en la piscina que hay en el vestuario”, desveló. Y, en lo segundo, se podría decir que es algo similar a decir: me saqué una espina. Pina, que fue una de las 15 jugadoras que se perdieron el Mundial que ganó España por protestar y pedir mejoras en la Selección, se quedó a las puertas de la Eurocopa.
La Roja perdió en la final del torneo disputado en Suiza el pasado verano y la delantera, que tampoco estuvo en la Nations League ganada hace poco más de un año, tenía este nuevo objetivo entre ceja y ceja.
Quedó constancia de ello en el verde. Pina hizo suya la final con dos golazos lejanos. Marca de la casa. “De los que me gustan”, remarcó en zona mixta tras la victoria por 3-0 ante Alemania en el Metropolitano. “La he robado ahí, en la frontal del área, y no me lo he pensado. Todavía no he visto ni el gol, la verdad. No sé realmente ni cómo ha sido”, decía. “Ha sido espectacular, ya te lo decimos nosotros”, le respondía un periodista desde los pasillos del Metropolitano.
El Mundial Sub-17 en el que Pina ya apuntaba maneras
De los que le gustan a ella y a todos los que llevan avisando de su potencial desde que se proclamó Bota de Oro en el primer Mundial que ganó España. Fue en categoría Sub-17 y sucedió en 2018, con una generación que ahora es presente de nuestro fútbol (Salma Paralluelo, María Méndez, Eva Navarro…) y con Pina como referente goleadora.
En aquella final, disputada en Uruguay y ante México, también marcó un doblete para coronar a la Selección entre las mejores. Ya apuntaba maneras de lo que llegaría siete años después. Casi nada. Un talento que quedó alejado de la Selección durante dos años para volver más reforzado.
“Hay mucho trabajo detrás. También renunciar a un sueño y poder volver con muchísimas ganas. Me dieron esa confianza también, que creo que era muy importante. Sentirme muy cómoda. Tanto con las jugadoras como con el staff. El antiguo y el de ahora. Muy feliz. Espero que vengan muchos más títulos”, subrayó Pina.
Y concluyó lanzando un aviso con el que apunta a seguir siendo importante en esta Selección. “Quiero aportar todo lo que pueda y devolver al equipo en el campo la confianza y apuesta por mí”. Porque no hay nada para saber valorar lo que tienes que haberlo perdido durante un tiempo. Y sin ese período no se podría entender a la mejor Pina. A esta Pina, que es MVP de la final de la Nations y, por ende, una parte importante de esta historia en la Selección.