A orillas del Mediterráneo, en un rincón oculto de la costa alicantina, se esconde una joya natural que cada vez atrae a más visitantes por su asombroso parecido con las islas griegas. Se trata de la Cala Portitxol, también conocida como Cala de la Barraca. Un paraje que ha conquistado a miles de viajeros gracias a sus aguas turquesas, sus casitas blancas con ventanas azul intenso y un entorno que parece sacado de una postal de Santorini.
Un paisaje mediterráneo que parece sacado de Grecia
Las imágenes que circulan en redes sociales están convirtiendo a la Cala Portitxol un fenómeno viral. Con un mar en calma, barcas flotando sobre aguas cristalinas, acantilados cubiertos de vegetación mediterránea y una hilera de casas encaladas, este enclave situado en la localidad de Jávea (Xàbia) parece más propio de las Cícladas que de la Comunidad Valenciana.
Lo que muchos desconocen es que la Cala Portitxol es un espacio natural protegido, poco intervenido por el turismo masivo, que conserva la autenticidad de su paisaje. Frente a su orilla descansa la Illa del Portitxol, un pequeño islote de gran valor botánico y arqueológico que aporta aún más encanto a la estampa.
@krisbuscandoalsol Comparte ✈️ No es Grecia ❌ es ESPAÑA 🇪🇸 📍La Cala Portitxol, famosa por sus casitas con puertas azules que recuerdan a Grecia 💙 se encuentra en la Costa Blanca y es una cala de aguas cristalinas y turquesas 🤩 perfecta para desconectar o para hacer snorkel 🤿 kayak o paddle surf 🏄♀️ Hay muchas otras calitas PRECIOSAS por la zona ✨ ⚠️ Es una playa de piedras, así que aconsejo usar escarpines ☝️ ❌La playa se llena mucho en Julio y Agosto, así que evitaría esos meses, el parking es muy reducido. ♻️Y recordad que hay que respetar el entorno y no dejar basura 😉 #summer #veranoenespaña #costablanca #calaportitxol #viajesentiktok
El principal atractivo de la Cala Portitxol es, sin duda, su mar. Las aguas que la bañan oscilan entre el azul profundo y el turquesa más luminoso. Ofrece unas condiciones idóneas para la práctica de snorkel. Con solo unas gafas, es posible avistar bancos de peces, erizos de mar, cangrejos e incluso pulpos en sus fondos rocosos.
Para los más aventureros, la Cala Portitxol también es un punto destacado para el buceo recreativo. La zona que rodea el islote ofrece una gran riqueza marina. Ideal tanto para principiantes como para buceadores con experiencia. Y, si se prefiere disfrutar de la superficie, el entorno tranquilo permite recorrer la costa en kayak. Una forma distinta de explorar este paraje.
Cómo llegar a Cala Portitxol y qué hacer en los alrededores
El acceso a la Cala Portitxol puede hacerse a pie desde el mirador de la Cruz del Portitxol. Una ruta sencilla de apenas kilómetro y medio que desciende hasta la ensenada. El recorrido está salpicado de vistas espectaculares y sirve como antesala al espectáculo natural que espera abajo.
Una vez en la Cala Portitxol, el visitante puede limitarse a disfrutar del paisaje o recorrer los senderos que serpentean por los acantilados. Miradores como el Cap Negre o el Cap Prim permiten obtener una panorámica completa del litoral de Jávea, mostrando la silueta de la costa alicantina recortada contra el azul intenso del mar.
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La Cala Portitxol no es el único rincón encantador de la zona. A pocos kilómetros se encuentra la Cala Granadella, otro enclave escondido entre montañas y pinares. De aguas verde esmeralda, es también uno de los rincones favoritos para los aficionados al snorkel y al buceo. Su acceso es algo más complicado, y su reducido tamaño obliga a llegar temprano si se quiere disfrutar de ella con tranquilidad.