Donatella Versace, a sus 69 años, acaba de dejar al mundo de la moda y a sus seguidores completamente sorprendidos. Durante el estreno de el musical El diablo viste de Prada el pasado domingo en Londres, la diseñadora ha aparecido más joven que nunca, deslumbrando con un rostro radiante que ha desatado una avalancha de elogios en redes sociales. Su sorprendente cambio se ha convertido en uno de los temas más comentados, desatando todo tipo de especulaciones sobre lo que se esconde detrás de su rejuvenecimiento.
En la alfombra roja del evento, la empresaria deslumbró con un vestido minúsculo de color bronce. Su aparición no pasó desapercibida tras su nueva apariencia. En sus fotos de Instagram, el contraste con su rostro de hace unos años es evidente: la diseñadora luce ahora una piel más tersa y un rostro visiblemente más fresco.
Acompañada de su íntimo amigo Elton John, quien ha compuesto la música para el espectáculo, que se centra en la comedia de 2006 protagonizada por Meryl Streep y Anne Hathaway, también posó junto a Anna Wintour, directora de Vogue desde 1988.
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La belleza según Donatella Versace
A lo largo de los años, Donatella Versace ha sido conocida por su destreza como diseñadora, pero también por su característico estilo personal, que ha estado siempre bajo el escrutinio de los medios. Su cara, reconocida por sus rasgos fuertes y distintivos, ha sido objeto de numerosas especulaciones y comentarios sobre cirugía estética desde principios de los 2000.
Las comparaciones con otras figuras públicas no se han hecho esperar. En las redes sociales, algunos fans se atrevieron a llamar a su cambio “la mayor mejora de la historia”. Sin embargo, lo que muchos pasan por alto es que este tipo de transformaciones no son solo el resultado de la cirugía, sino también de una gran estrategia de imagen que se adapta constantemente a las tendencias del momento.