Sobre la una del mediodía de este miércoles los agentes de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil sorprendieron a Leire Díez, fontanera del PSOE, en el marco de una investigación declarada secreta motivada por una querella de la Fiscalía Anticorrupción. Le llevaron al calabozo de Tres Cantos, donde aún hoy se encuentra.
Su abogada se trasladó a presenciar el registro de su domicilio en Madrid. De allí, los agentes se llevaron de todo, desde ordenadores a móviles pasando por otros dispositivos móviles, según las fuentes consultadas por Artículo14.
Fuentes de la defensa de Díez aseguran a este periódico que la Guardia Civil “no buscaba nada en concreto” durante el registro. Y reconocen que su defendida está “destrozada”, tras pasar su segunda noche en el calabozo.
Las mismas fuentes confirman que, en uno de los autos de entrada registro, vieron que los agentes buscaban el contrato de compraventa de un coche por un valor de 21.000 euros, que los investigadores sospechan que se trataría de una comisión encubierta por contratación pública. Una contraprestación que habría dado Vicente Fernández a Leire Díez.
Fernández es otro nombre clave en la investigación. El que fuera presidente de la SEPI coincidió laboralmente con Leire Díez cuando ella trabajó de jefa de comunicación de ENUSA, una empresa pública de energía nuclear dependiente de este organismo gubernamental. Pero fuentes del caso sospechan que los contratos que están bajo la lupa de la UCO son posteriores.
La detención de Antxón Alonso
También está detenido Antxón Alonso, el socio y amigo de Santos Cerdán y dueño de Servinabar. La empresa que, presuntamente, ambos usaron como vehículo para cobrar las comisiones ilegales de la contratación de obra pública amañada junto a Acciona.
En total, sospechan los agentes de la Guardia Civil que se llevaban el 2% de las obras que conseguía Acciona, unos 6,7 millones de euros contabilizados por la UCO. Casualmente, Fernández estuvo contratado por Servinabar como director comercial entre 2021 y 2023. Por ello, Santos Cerdán gana relevancia en toda esta trama, tal y como avanzó Artículo14.
No hay que olvidar que Leire Díez presumía de una relación estrechísima con Santos Cerdán. A sus interlocutores, decía que “era su mano derecha” que le habían ordenado “limpiar” desde el PSOE cuando estalló el caso de la mujer de Pedro Sánchez. Todo esto está judicializado en una causa aparte en los juzgados de Plaza Castilla, donde está imputada por tráfico de influencias y cohecho.
Negro futuro judicial
Sin embargo, el futuro judicial de Leire Díez es mucho más complejo en esta causa que instruye el juez Antonio Piña en la Audiencia Nacional. Se le investiga en principio por malversación, prevaricación, tráfico de influencias y pertenencia a organización criminal. Los datos apuntan a una gran trama de corrupción. Ha habido 19 registros en distintas provincias de España en la sede de empresas dependientes de la SEPI: Mercasa, de distribución alimentaria; Enusa, donde ella trabajó; y Sepides, dedicada al apoyo de inversiones. También se han investigado empresas vinculadas con Antxón Alonso como Forestalia.
Además, fuentes de la investigación confirman a Artículo 14 que habrá más imputados en el caso, aún desconocidos, que declararán en los próximos días.
Por el momento, Leire Díez permanece en Tres Cantos aunque el sábado pasará a disposición judicial a las diez de la mañana. Entonces tendrá que decidir si colabora con la Justicia. Después de ello, la fiscal del caso, Elisa Lamela, solicitará al juez las medidas cautelares que considere oportunas y se decidirá si permanece en prisión provisional.
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