Los vecinos que dependen económicamente de la central nuclear de Almaraz han dejado en las urnas un mensaje contundente: apoyan su continuidad. El voto nuclear consolida al PP y dispara a Vox, con crecimientos de doble dígito en localidades como Almaraz, Belvís de Monroy, Navalmoral de la Mata y Saucedilla. En estas poblaciones, con la excepción de Navalmoral de la Mata -la más poblada-, el censo del INE a enero de 2025 refleja una ligera mayoría masculina. Los hombres representan alrededor del 48% de su población, mientras que en Navalmoral, considerada la capital comarcal de Campo Arañuelo, las mujeres superan el 51%. Lo ocurrido en estas poblaciones refleja, no solo la defensa de la central, sino también que las mujeres han respaldado a Vox.
En la defensa de la central nuclear, las mujeres están desempeñando un papel especialmente activo. Ello ayuda a explicar en parte el fuerte castigo electoral al PSOE y a Podemos. Miguel Ángel Gallardo, que dimitió ayer como secretario general del PSOE de Extremadura tras la debacle electoral, mantuvo durante la campaña un discurso tibio sobre la continuidad de la central, intentando equilibrar la posición de Ferraz con la del partido en la región. Aunque se mostró convencido de que el Gobierno central iba a prorrogar su vida útil, no logró arrancar un compromiso firme. Por su parte, Ángela de Miguel, candidata de Podemos, defendió el cierre de la central en el marco de la transición energética.
De la central de Almaraz depende una parte sustancial de la economía del norte de Cáceres. Más de 4.000 familias viven directa o indirectamente del empleo vinculado a la instalación. Su cierre amenaza la fijación de población rural, a la que también contribuye el cultivo de tabaco. Así, junto al empleo altamente cualificado que genera la central, en estas poblaciones la población de origen extranjero concentra mayoritariamente la mano de obra agrícola.
En detalle: Navalmoral y Almaraz
El caso más llamativo es Navalmoral de la Mata, octava localidad más poblada de Extremadura, con casi 8.900 mujeres censadas, alrededor de 400 más que hombres en total. Vox se ha convertido en la segunda fuerza con 1.701 votos, el 23,5% del total. Frente a las elecciones de 2023, supone un crecimiento de más de diez puntos porcentuales. A su vez, el PP afianzó su liderazgo con el 45% del total. En estas elecciones, en esta población el votó cayó casi un 8%, hasta situarse 6.980 papeletas. De esta forma, PP y Vox concentraron el 68,55% del voto emitido. Por el contrario, el PSOE retrocedió por debajo del 20%, tras perder casi un millar de votos.
En la localidad de Almaraz, la más próxima a la central, el castigo al PSOE fue aún más contundente, con una fuerte caída de la participación cercana al 22%. Los socialistas, segunda fuerza en las anteriores elecciones con un 35,7% de los votos, retrocedieron hasta el 17,10%, al perder más de la mitad de su electorado. Al mismo tiempo, Vox protagonizó un ascenso de doble dígito, al pasar del 10,20% a más del 23,40%. El PP (46,6%, frente al 39,20% de 2023) y Vox sumaron siete de cada diez votos, cuando hace dos años apenas alcanzaban el 50%.
Una corriente en la zona
A apenas ocho kilómetros se encuentra Saucedilla, donde el crecimiento de Vox fue aún más destacado. La formación verde pasó del 12% de votos en 2023 a más del 30%. Mientras, el PP -que también fue la formación más votada, ganó 1,71 puntos porcentuales (37,01%). Por su parte, el PSOE de Miguel Ángel Gallardo fue la tercera fuerza, con 82 votos, los mismos que en las anteriores elecciones, aunque con un aumento de 5,92 puntos porcentuales, por la fuerte caída de la participación.
En Belvís de Monroy, situado algo más lejos (unos diez kilómetros) de la central de Almaraz y con algo menos de 800 habitantes, la tónica fue la misma al del resto de municipios del entorno. El PP se situó en primer lugar con 182 votos (39,73%), mientras que Vox alcanzó la segunda posición con 112 papeletas (24,45%), arrebatando ese puesto al PSOE, que pasó de 150 votos en 2023 a 99 en esta convocatoria, descendiendo así al tercer puesto (21,61%).
Pelota en el tejado del Gobierno
Entretanto, la continuidad de Almaraz queda ahora en manos del Gobierno, tras la propuesta de las empresa propietarias para alargar su vida útil. El pasado 30 de octubre, Iberdrola, Endesa y Naturgy solicitaron formalmente al Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO) una prórroga para mantener operativos ambos reactores hasta junio de 2030. Según el calendario vigente, el cese de actividad del primer reactor está previsto para el 1 de noviembre de 2027, y el de la segunda unidad, para el 31 de octubre de 2028.
El siguiente paso es el informe del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) sobre las condiciones de seguridad de la planta. A partir de ahí, Sara Aagesen, vicepresidenta tercera del Gobierno, deberá valorar si se cumplen las otras dos condiciones fijadas por el Ejecutivo: la viabilidad económica, para que la prolongación no tenga impacto en el bolsillo de los ciudadanos, y la contribución a la seguridad de suministro. Los vecinos del entorno ya se han pronunciado en las urnas.
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