Tras 50 años de debates y polémicas, los diputados franceses han aprobado por primera vez una ley sobre la muerte asistida, legalizando el suicidio asistido y la eutanasia. Este martes, la Asamblea Nacional de Francia ha votado a favor, en primera lectura, de una proposición de ley que legaliza y regula la eutanasia para enfermos incurables que padezcan sufrimientos insoportables.
Al término de una sesión marcada por las lágrimas de la ecologista Sandrine Rousseau, los dos proyectos de ley sobre el “final de la vida”, el destinado a extender los cuidados paliativos (560 votos a favor, 0 en contra), y el que abre la “asistencia activa a la muerte” (305 votos a favor, 199 en contra) han sido aprobados. El texto pasará al Senado antes de volver a la Asamblea para su debate en segunda lectura, previsiblemente hacia finales de año, informa Efe.
Según destaca la prensa francesa, los debates en el Hemiciclo han durado dos semanas y se han desarrollado en un ambiente tranquilo. Los diputados tenían libertad de voto ante la sensibilidad de la votación.