Cuando el calor aprieta y el asfalto se convierte en un horno, encontrar un rincón donde desconectar y refrescarse puede parecer un privilegio reservado a los que tienen la costa cerca. Pero en Soria, a poco más de media hora de la capital, existe un lugar donde los días de verano se disfrutan entre pinos, arena fina y aguas tranquilas: la Playa Pita.
Situada en el entorno natural del Embalse de la Cuerda del Pozo, esta playa fluvial se ha convertido en el gran pulmón de ocio del verano soriano. Rodeada por el bosque de Pinar Grande, la zona ofrece un paisaje de postal, con una lámina de agua serena, bancos de arena suave, senderos entre pinares y un ambiente familiar y relajado que nada tiene que envidiar a las playas costeras.
Un enclave natural con historia
Lo que hoy conocemos como Playa Pita no siempre tuvo ese nombre. De hecho, su denominación se remonta a los años 50, cuando Ramón Pita Las-Santas, entonces director del Instituto Nacional de Previsión, decidió instalar su tienda de campaña en la orilla del embalse para pasar los veranos en plena naturaleza. Aquel gesto fue el germen de una tradición que fue creciendo entre amigos, vecinos y familiares, hasta que el nombre “Playa Pita” quedó asociado para siempre a este rincón soriano.

¿Qué ofrece Playa Pita?
La zona recreativa está pensada para pasar el día completo, sin que falte nada. Dispone de un bar, servicios, botiquín, mesas-merendero, fuentes repartidas por el bosque, un amplio aparcamiento y hasta un almacén para barcas. Además, hay una pequeña zona infantil que convierte el lugar en el plan ideal para familias con niños.
Los amantes del deporte también encuentran su espacio aquí. El embalse permite la práctica de deportes acuáticos como el paddle surf, los paseos en hidropedales o la natación en zonas autorizadas. Todo ello rodeado de un bosque que invita al senderismo, a la lectura bajo los árboles o, simplemente, al descanso.
Aunque el baño está permitido y hay zonas habilitadas para ello, conviene tener precaución, sobre todo si se nada mar adentro. Las autoridades han advertido en varias ocasiones sobre los peligros de sumergirse en zonas no vigiladas, ya que el embalse puede tener zonas con corrientes o cambios bruscos de profundidad.
Cómo llegar
Playa Pita se encuentra dentro del monte catalogado como Pinar Grande nº 172, propiedad del Ayuntamiento de Soria y de la Mancomunidad de los 150 Pueblos. El acceso se realiza por la carretera SO-840, que une Abejar con Molinos de Duero. A la altura del punto kilométrico 9 parte una pista forestal señalizada que conduce, tras menos de un kilómetro, directamente a la zona recreativa.
Su cercanía a municipios como Vinuesa, Molinos de Duero o Abejar permite complementar la visita con un paseo por alguno de estos pintorescos pueblos de la sierra castellana, ideales para una comida tradicional o una visita cultural.
Un verano sin salir de Castilla y León
En una comunidad con decenas de playas fluviales, Playa Pita destaca no solo por su entorno sino por su historia, su comodidad y su accesibilidad. No es extraño ver cómo, en los meses de julio y agosto, el lugar se llena de familias que acuden con neveras, sombrillas y ganas de desconectar. La jornada se reparte entre baños, comidas al aire libre, partidas de cartas, paseos y, por qué no, una siesta a la sombra.