El caso Salazar, lejos de atenuarse, continúa generando polémica y salpicando al PSOE después de su nula gestión. Ahora, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha puesto el foco sobre la fiscal general del Estado, Teresa Peramato, a quien insta a actuar : “Pienso que no todo es negativo, hay una buena noticia, que la nueva fiscal general del Estado se declara feminista y es experta en violencia y acoso contra la mujer. Por lo tanto, en ella confiamos y todas las mujeres de España estamos expectantes para ver su trabajo y cómo va a actuar en estos casos de acoso a mujeres en La Moncloa.
En una declaración durante su visita al inicio del montaje de la tuneladora Mayrit, que participará en las obras de ampliación de la Línea 11 de Metro de Madrid, la presidenta de la Comunidad de Madrid ha mencionado que, en la actualidad política, “no todo son malas noticias“.
“Problema de plazos”
Tal como contaba Alejandro López de Miguel en Artículo14 este domingo, el Gobierno rebaja el caso Salazar a un problema de plazos y no cree que tenga efecto electoral. El Ejecutivo ha reducido la crisis a un retraso explicable por un déficit de “recursos humanos”, y esquivando cámaras y micrófonos.
El sábado, Pedro Sánchez afrontó por primera vez la crisis que ha acaparado buena parte de los focos mediáticos durante la semana, para afirmar que asume “en primera persona” la “responsabilidad” por los errores cometidos por el PSOE en la gestión de esta crisis. El presidente del Gobierno sabía que en los corrillos con periodistas en el Congreso de los Diputados, durante los actos por el día de la Constitución, tendría que afrontar preguntas sobre las gestión de las dos denuncias contra Paco Salazar por supuesto acoso a extrabajadoras de Moncloa.
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