En medio del bullicio de El Retiro, donde miles de lectores se acercan estos días a la Feria del Libro de Madrid, Artículo14 invita a detenerse, observar y pensar con el cuerpo. La arquitecta y exdiputada Melisa Rodríguez, colaboradora del medio, propone una lectura singular para este mes de libros y encuentros: La mano que piensa, del arquitecto y teórico finlandés Juhani Pallasmaa.
Publicada en español por la editorial GG, esta obra breve pero incisiva desarrolla una tesis central: el conocimiento no reside solo en la mente, sino también en el cuerpo. La mano, como extensión del pensamiento, es la protagonista de un ensayo que interpela tanto a arquitectos como a artistas, filósofos o lectores curiosos. Frente a la tendencia contemporánea a lo visual y lo digital, Pallasmaa reivindica el valor del hacer, del tocar, del construir con los sentidos.

Melisa Rodríguez —que ha combinado su trayectoria política con una firme defensa del pensamiento interdisciplinar y del arte como herramienta de transformación— no duda en recomendar este texto que rompe con la tradición cartesiana y celebra la inteligencia incorporada. La mano que piensa plantea una crítica a la desvinculación entre razón y acción manual, entre teoría y experiencia, y propone volver a conectar el diseño, la creación y el pensamiento desde una perspectiva más humana y sensorial.
Pallasmaa, autor también de Los ojos de la piel, es uno de los arquitectos contemporáneos más influyentes en la reflexión sobre el habitar, los sentidos y la poética del espacio. En La mano que piensa, sus referencias cruzan disciplinas: de Merleau-Ponty a Heidegger, de la escultura al cine, de la música a la enseñanza artística. El resultado es un manifiesto contra la tecnificación del conocimiento y un elogio del cuerpo como instrumento cognitivo.
“Trata de buscar el sentido a las cosas más allá del sentido de la vista, invitando a una revolución sensorial”, explica Melisa Rodríguez. “Me lo han recomendado ante la necesidad que tengo ahora de conectar con el diseño, reflexionar con el silencio y la búsqueda de la transición de más emociones con mis creaciones”.
No es un libro al uso para una feria dominada por la narrativa o el ensayo político, pero precisamente por eso cobra fuerza como propuesta alternativa. Rodríguez invita así a pensar con otra velocidad, desde otro lugar, y a recuperar la conexión con lo material en tiempos donde la inteligencia parece cada vez más artificial.

Un autor con inteligencia material
Juhani Pallasmaa no acudirá a esta edición de la Feria del Libro de Madrid. Sin embargo, su presencia intelectual se hace sentir entre lectores que buscan más allá del relato y se sumergen en textos que cuestionan cómo percibimos, cómo proyectamos y cómo habitamos el mundo. La mano que piensa no solo interpela a arquitectos: también a educadores, artesanos, diseñadores, médicos o lectores que intuyen que pensar no empieza ni termina en el cerebro.