Sirat, el último largometraje de Oliver Laxe, ha superado el primer gran filtro de la temporada de premios y se ha situado en la shortlist de los Premios Oscar, con presencia en cinco categorías: mejor película internacional, mejor fotografía, mejor música original, mejor sonido y mejor casting, según ha comunicado la Academia de Hollywood. Un hito que confirma el recorrido internacional de una de las propuestas más radicales y personales del cine español reciente.
La película, un drama sensorial ambientado en el universo de las raves del desierto africano, fue elegida como representante española tras imponerse en las votaciones de la Academia de Cine a Romería, de Carla Simón, y Sorda, de Eva Libertad. Con esta primera criba superada, Sirat consolida su posición en la carrera hacia los Oscar 2026, cuya gala se celebrará el 15 de marzo.
La prensa especializada estadounidense ha acogido la noticia con atención. Variety, uno de los grandes termómetros de Hollywood, ha situado al filme de Laxe en una posición destacada dentro de esta primera selección, en una edición especialmente competitiva. Las votaciones para determinar las nominaciones definitivas se abrirán el 12 de enero y se cerrarán el 16, mientras que los nombres finalistas se darán a conocer el 22 de enero.
En la categoría de mejor película internacional, Sirat competirá con títulos de fuerte peso autoral como El agente secreto, del brasileño Kleber Mendonça Filho; Valor sentimental, del noruego Joachim Trier; La voz de Hind, de la cineasta tunecina Kaouther Ben Hania; o Un simple accidente, coproducción francesa dirigida por el iraní Jafar Panahi.
Premiada con el Premio del Jurado en el Festival de Cannes, la película de Oliver Laxe propone una experiencia inmersiva que no busca complacer al espectador. Protagonizada por Sergi López, la historia sigue la búsqueda de una hija y una hermana en un territorio extremo, físico y emocional, donde el viaje se convierte en una exploración del alma humana. La potencia visual de la puesta en escena y la banda sonora de Kangding Ray, fundamental en la arquitectura del filme, sostienen una propuesta que asume el riesgo como principio creativo.
El propio director ha subrayado en los últimos días el carácter contracorriente de su trabajo. Durante la presentación de su proyecto Hu. Bailad como si nadie os viera, una instalación concebida para el Museo Reina Sofía, Laxe se mostró prudente ante las expectativas: “Es una película muy a contracorriente en estos tiempos de algoritmo. No creo que vaya a ganar el Oscar, pero estoy muy contento porque he conectado con la gente”.
El cineasta se declaró “tranquilo y en paz” ante el recorrido de Sirat en la temporada de premios, aunque no ocultó su deseo de que la película llegue “lo más lejos posible”. Para Laxe, el verdadero éxito ya está cumplido: haber establecido un vínculo con el público sin renunciar a una mirada exigente y personal. Un reconocimiento que, además, le otorga una mayor libertad creativa de cara a sus próximos proyectos.
Con Sirat, España vuelve a situarse en el mapa de la carrera internacional tras el precedente de La sociedad de la nieve, de Juan Antonio Bayona, que en la edición anterior alcanzó la fase final en dos categorías. El próximo 15 de marzo se sabrá hasta dónde llega el viaje de una película que ha hecho del riesgo, el cuerpo y la experiencia sensorial su principal declaración de intenciones.