Iberdrola llamó a sus embajadoras para celebrar que 800.000 mujeres federadas ya son parte del apoyo de la energética al deporte femenino.
La primera medalla en halterofilia en España llegó de la mano de Lydia Valentín. “Persona, no mujer, porque ningún hombre la ha conseguido nunca tampoco”. Esa es la matización que la del Bierzo suele hacer cuando le ponemos la prensa un micrófono delante. Y es que el deporte de fuerza por el que se apasionó “era un deporte dirigido al género masculino, esta notoriedad ha chocado siempre mucho”.
Campeona olímpica, Alejandro Blanco, presidente del COE, ha reconocido públicamente siempre, que Lydia es una de sus debilidades. Y es que su camino echando la vista atrás no ha sido nada fácil. Por ello, iniciativas como la de Iberdrola ella las celebra aunque ahora las vea desde la barrera. “Es algo muy necesario para el deporte español”.
Y cuando Lydia Valentín reclama el apoyo económico lo hace sabiendo a ciencia cierta que eso conlleva resultados deportivos. Ella habla desde la experiencia de un deporte minoritario y muy desconocido “yo vengo de una federación muy pequeña, con muy pocos recursos y muy poca visibilidad y de un deporte que no era tan conocido”. Veinte años después “llenos de esfuerzo y de dedicación” le han merecido la pena. Triple medallista olímpica, cuatro juegos disputados y una lesión de cadera que le frenaron una carrera meteórica. “Prefería retirarme antes que ir París sin estar al cien por cien”, y con esa honestidad el septiembre pasado dijo adiós.
“Después de cuatro ciclos olímpicos, ahora quiero disfrutar de los Juegos de otra manera”
La retirada, es ese gran escollo al que los deportistas de élite tienen que enfrentarse. La nueva vida de Lydia aunque no esté en la competición sigue ligada al deporte “yo soy una apasionada al deporte y eso siempre va a ir conmigo. Por eso estoy agradecida de estar vinculada a este mundo a través de este tipo de eventos. Me encantan”. Lo dice mientras admira las vistas del Centro Nacional de Golf y bromea sobre si quizá es su nueva dedicación.
Unos juegos con un rol diferente
Este año de JJOO, Lidia no va a hacer la maleta ni se alojará en una Villa Olímpica por primera vez en dieciséis años. “La verdad que este año no me importa nada no ir, lo estaba comentando también con Ona Carbonell, son cuatro ciclos olímpicos, con lo que eso conlleva, ahora quiero disfrutarlos”, la campeona olímpica de Halterofilia y primera medalla española en este deporte, además hará sus primeros pinitos como comentarista para Eurosport este verano olímpico. “Yo nunca pude ver ningún deporte, porque cuando estás allí compitiendo solamente tienes el foco en el tuyo. Este año me apetece verlo y disfrutarlo desde otra perspectiva” nos confesó la de Ponferrada.
Su presente ahora se centra ahora en expandir la halterofilia por España a nivel profesional a través de conferencias, seminarios y formaciones. Este verano además podremos disfrutar de su experiencia olímpica a través de televisión. “Gente que quiere comenzar, en edad adulta, me gusta mucho que mi experiencia pueda servir a otros para engancharse a este deporte, estamos viendo que hay mucha demanda”. Si ahora las niñas se apuntan a un deporte que poco o nada tenía que ver con el universo femenino, ahora tendrán de referencia los éxitos de la primera, de Lydia Valentín.
Los apoyos se traducen en medallas
La parte más bonita del deporte, la que ella ha saboreado en Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020 “la del triunfo, esa es la que más se ve” nos recuerda. Pero también reflexiona en la importancia de seguir impulsando el deporte, “cuando tu ayudas a las federaciones eso luego se nota, se traduce en éxitos. España quiere medallas olímpicas pero sin apoyos no se puede. Gracias a esos apoyos ahora tenemos muchos referentes”.