El Congreso de Perú ha destituido de manera exprés a la presidenta, Dina Boluarte, tras aglutinar cuatro mociones de vacancia para declarar su “permanente incapacidad moral” para enfrentar la creciente inseguridad ciudadana y el auge del crimen organizado, cuando faltan escasos seis meses para las elecciones generales de 2026.
El Legislativo peruano ha aprobado las cuatro mociones para sacar a Boluarte del poder con 122 votos a favor de un total de 130, una cifra muy superior a los 87 que se requerían para que la iniciativa fuese exitosa.
La primera presidenta mujer de Perú termina así un mandato de dos años y diez meses desde que a finales de 2022 asumiese la Presidencia para suceder al izquierdista Pedro Castillo, del que era su vicepresidenta, y se mantuviese en el poder gracias al respaldo de un grupo de fuerzas de derecha, las cuales controlan el Congreso y que ahora han promovido y apoyado su salida.
Sobre la sucesión presidencial que recoge la Constitución peruana, será el presidente del Congreso, José Jerí, quien asume la jefatura del Estado al no tener Boluarte vicepresidentes.
Boluarte no acude al hemiciclo
Boluarte no ha acudido al hemiciclo para ejercer su derecho a defensa, por lo que Jerí ha anunciado la decisión de continuar con el proceso de destitución. “En vista de que ha sido convocada y no se ha presentado se procederá con el proceso de vacancia”, ha remarcado.
De inmediato ha propuesto que comience un debate de las mociones, pero un grupo de parlamentarios ha planteado una cuestión previa para evitar ese proceso e ir de inmediato a la votación. Poco antes, uno de los abogados de Boluarte, Juan Carlos Portugal, ha anunciado en la red social X que la gobernante no iba a convalidar el proceso en su contra acudiendo al Congreso. “Un debido proceso parlamentario -cuya decisión afecta derechos constitucionales- tiene mínimas y esenciales exigencias. El derecho a la defensa, y su preparación dentro de un plazo razonable, es una de ellas”, aseguró.
Otro de sus abogados, Joseph Campos, ha informado en la cadena estatal TV Perú que él le recomendó a la gobernante que no asista al Congreso porque desconocían el contenido de mociones de vacancia presentadas en su contra.
El proceso contra Boluarte
El proceso ha sido irreversible después de recibir el respaldo de los partidos de derecha que hasta ahora sostenían a Boluarte en el poder desde que asumió la Presidencia en diciembre de 2022. Cabe mencionar que solo faltan seis meses para que se celebren las elecciones generales peruanas de 2026, convocadas para el mes de abril.
Entre los promotores del proceso de destitución ha habido varios partidos que han respaldado a la mandataria, pero que tienen líderes con aspiraciones presidenciales. Es el caso del conservador Rafael López Aliaga, de Renovación Popular, y del empresario José Luna, de Podemos Perú.
Boluarte deja el cargo como la presidenta más impopular de Latinoamérica, con una aprobación de apenas un 3% según varias encuestas, debido a las más de 50 muertes durante la represión a las protestas que pedían nuevas elecciones tras la destitución y encarcelamiento de Castillo, así como numerosas investigaciones por presunta corrupción.