La presentadora Nuria Roca y su marido, el escritor y colaborador televisivo Juan del Val, comparten mucho más que plató en El Hormiguero.
La pareja vive junto a sus tres hijos y sus mascotas en una impresionante vivienda en Pozuelo de Alarcón, un exclusivo municipio madrileño. Su hogar es un reflejo de su estilo vital: acogedor, con carácter, y lleno de detalles cuidados que combinan diseño, funcionalidad y calidez.
Un recibidor icónico que da la bienvenida con estilo
Si hay un rincón de la casa que los seguidores de Nuria en Instagram conocen bien, ese es el recibidor. La presentadora suele compartir selfies frente al gran espejo de esta estancia, que destaca por su escalera al fondo, una alfombra mullida que aporta calidez y un puf XL que sirve tanto para descalzarse como para dejar el bolso nada más llegar. Un espacio práctico y fotogénico.

Un salón amplio, moderno y lleno de vida
El salón principal es uno de los espacios más disfrutados por la familia. Con un sofá azul marino de gran tamaño y textura suave, cojines de colores, butacas tapizadas en tonos melocotón y una chaise longue, es ideal para el descanso. El suelo hidráulico en tonos grises y amarillos añade un toque visual muy atractivo, mientras que mesas redondas doradas, una lámpara de pie tipo arco y estanterías con libros y objetos vintage completan la escena. La chimenea, incluso en verano, luce impecable como parte del diseño.

Comedor con piezas de diseño y alma propia
La pasión de Nuria por las sillas se refleja en el comedor, donde destacan las icónicas Wishbone de Hans J. Wegner. Una mesa de cristal, una chaise longue naranja, una gran planta natural y un aparador de aire retro aportan personalidad a esta estancia, que está decorada con mimo y calidez.
La cocina, epicentro familiar y creativo
Como buenos amantes de la gastronomía, la cocina es otro punto fuerte del hogar. Moderna, con muebles lacados en blanco y una amplia isla central con encimera de mármol, es un espacio tan funcional como bonito. Además, hay una zona tipo office, ideal para desayunar o tomar un café, que se conecta visualmente con el resto de la casa gracias a su cerramiento de cristal con estructura metálica negra.

Espacios versátiles: despacho, bar y zona de ejercicio
La casa también cuenta con una zona de barra de bar, un despacho-biblioteca repleto de libros, discos y películas, y un rincón estratégico bajo la escalera donde se guarda la bicicleta estática sin romper la armonía del interiorismo.
Dormitorio en clave minimalista y luminosa
El dormitorio de la pareja transmite tranquilidad gracias a su paleta neutra, mobiliario sencillo y detalles acogedores como un cabecero acolchado o una butaca junto a la ventana donde Nuria suele leer. Las fotografías familiares completan este rincón íntimo y especial.
Un jardín lleno de rincones mágicos (y piscina incluida)
El jardín es otra joya de la vivienda. Rodeado de plantas, árboles y macetas, cuenta con una zona chill out con sofá, sillas de mimbre, cojines y luces colgantes que crean un ambiente perfecto para las noches de verano. Además, dispone de una piscina privada con tumbonas, ideal para relajarse o practicar deporte al aire libre. La caseta para las mascotas demuestra que en esta casa, cada miembro cuenta.

Una casa con el sello personal de Nuria y Juan
El hogar de Nuria Roca y Juan del Val es mucho más que un lugar bonito: es un espacio vivido, con alma, donde cada rincón refleja sus gustos, sus recuerdos y su forma de entender la vida. Diseño contemporáneo, amor por lo retro y calidez familiar se combinan en este chalet que no deja indiferente a nadie. Una casa en la que, sin duda, apetece quedarse.