Leire Díez es la mujer de la semana y, disculpen la hipérbole febril, la de la legislatura. La conversación desvelada entre esta militante del PSOE, los empresarios Alejandro Hamlyn y Javier Pérez Dolset y el abogado Jacobo Teijelo, en la que buscaban trapos sucios de la UCO, y en la que ella decía que si el teniente coronel “Balas está muerto, mejor”, puede haberle causado una muy grave lesión de cadera, quizá irrecuperable, al sanchismo. La Historia dice que el presidente Sánchez saldrá vivo de esta, si bien cabe señalar que en el propio PSOE, allende el habitual Page, y, lo más sorprendente, en algunas de sus casas de masajes mediáticas, el escándalo de la “fontanera” ha generado grietas y goteras. En la sesión de control de este miércoles, el PP denunció la “guerra sucia de este Gobierno mafioso” (Juan Bravo), una “organización criminal” (Miguel Tellado) “con sede en Sicilia” (Elías Bendodo). Horas después, escuchamos a Pérez Dolset asegurar en una grabación de septiembre de 2024: “Esto es Pedro Sánchez, directamente con Cerdán, con Santos Cerdán, y directamente con Leire”. La herida hiede, está abierta e infectada. Veremos si se transforma en una sepsis…
Artículo 14 ha publicado que Díez, valiéndose de un Filípides sociata, quiso sobornar al fiscal Anticorrupción José Grinda: “Le llegó una persona que conocía de antes diciendo que si sacaba mierda de su jefe –el fiscal jefe Anticorrupción, Alejandro Luzón– y daba carpetazo a casos que afectaban al empresario Pérez Dolset, a Duro Felguera y a los soberanistas, como el del 3% y la familia Pujol, obtendría un buen destino en el extranjero”; si no, pagarían 90.000 lereles contantes y sonantes a una supuesta fulana que amenazaba con denunciar a Grinda. La “fontanera” también ofreció a El Español un supuesto vídeo de contenido sexual de este fiscal. A El Español. El periódico de Pedro J. Ramírez, víctima de las cloacas infames del felipismo. Por lo que fuera, vaya usted a saber, El Español rechazó el ofrecimiento. Vaya luces las de la “fontanera”.
Díez saltó tímida y furtiva a la palestra mediática en septiembre del año pasado. Un periodista de El Confidencial quedó con esta presunta colega en Pintor Rosales, a pocos metros de Ferraz. Ella admitía haber analizado grabaciones de Villarejo para buscar munición contra los enemigos del PSOE, a la vez que rechazaba cualquier relación orgánica con el partido. Sin embargo, un fotógrafo del periódico acechaba cerca de la sede, y clic, clic: la pilló y la retrató entrando y saliendo de su topera. A los pocos días, el citado digital la mostraba flamante, vestida de rojo, bolso negro y gafas de sol, entre Mata Hari y tu tía Paqui de bautizo. Este 7 de marzo, Víctor de Aldama, en El programa de Ana Rosa, la volvió a invocar: “Hay tres personas que son los fontaneros o llamémoslo las cloacas del PSOE, que están bajo mando de Santos Cerdán. Son Javier Pérez Dolset, Jacobo Teijelo y Leire Díez. Se están poniendo en contacto con empresarios y gente para ofrecerles indultos y para ofrecerles tratos de favor siempre y cuando declaren contra mí, mientan sobre mí”. Este jueves, El Mundo publicó que, reunida el 10 de marzo en un restaurante de Leganés con el comandante de la Guardia Civil Rubén Villalba, le pidió ayuda para que “bajo ningún concepto puedan salir determinadas informaciones”. El tufo a cadaverina es insoportable.
Así se presentaba Díez en su vieja cuenta de X, ya chapada: “Periodista. Feminista. Educando en igualdad. Existe el paraíso, está en Vega de Ras. Rural, a mucha honra”. Fue teniente de alcalde y secretaria general del PSOE en Vega de Pas (Cantabria), participó en Movilización en la campaña electoral de las generales del 2011, formó parte del equipo de Eva Díaz Tezanos en su candidatura en la secretaría general de Cantabria y fue responsable de comunicación en Enusa y Correos. Según Vozpópuli, fue denunciada en 2009 por, junto a su esposo, amenazar de muerte a unos vecinos. La hemos visto fotografiada con Sánchez, Begoña Gómez, José Luis Ábalos o Patxi López. Sanchista furibunda, en sus redes se ha ciscado en Page, “ambidiestro y cansino”, Susana Díaz, “monja insulina” –querría decir “ursulina”, supongo– e incluso la gente que lleva banderas de España: “Esta es una de las imágenes que mejor explican la anormalidad facha”. En El Plural, pasquín amigo, ha declarado que “todo esto no es más que una burda manipulación de El Confidencial”. En El País ha dicho que quería “escribir un libro de investigación sobre temas de hidrocarburos”. Va de Oriana Fallaci, pero me recuerda a Lucille Botzcowski, la niñera mala de Los Simpson, y a Madame Medusa, la villana de Los rescatadores.