María Patiño, en medio de la constante presión mediática y la polémica cancelación de La familia de la tele por parte de RTVE, lanza una petición muy específica en redes sociales. Patiño deja claro que quiere recuperar su esencia, alejarse de la tensión continua y volver a disfrutar y crecer en su labor profesional.
María Patiño estalla en redes sociales
La presentadora María Patiño se ha lanzado a las redes, concretamente a través de su cuenta de X, con un mensaje muy revelador sobre la situación que atraviesa actualmente:
Estas palabras han resonado con fuerza entre sus seguidores, en medio del complicado contexto que atraviesa tras las continuas polémicas y la próxima cancelación (aún sin fecha confirmada) de su programa La familia de la tele en TVE. Conocida por su carácter fuerte y su profesionalismo, ha dejado entrever una vulnerabilidad que rara vez se muestra en televisión. En su publicación en X (antes Twitter), Patiño se abre en canal para explicar que ya no se reconoce a sí misma. “Quiero fluir, quiero preguntar para saber. No quiero estar constantemente en tensión, no quiero ser corregida en todo momento”, escribe con sinceridad. Y concluye: “Quiero divertirme, quiero aprender, quiero crecer”.
Estas declaraciones no han pasado desapercibidas. Muchos usuarios celebran su valentía por mostrarse tal y como es, sin miedo al “qué dirán”. Otros comparten sentimientos similares: esa sensación de estar bajo presión constante, de no poder ser uno mismo en un entorno que exige perfección y control en cada movimiento. Al final, es un sentimiento que se puede extender a muchos otros casos.
¿Qué pasará con Patiño tras la cancelación de La Familia de la Tele?
El trasfondo de este desahogo es la incierta situación de La familia de la tele, programa que Patiño presentaba en La 1 y que fue cancelado tras varios tropiezos. Esta sustitución, inesperada y sin explicaciones claras, dejó a María descolocada y a la audiencia indignada, quizá por no haberla llevado a cabo antes y hacerlo ahora de malas maneras. RTVE no ha dado aún una fecha definitiva para la cancelación formal del programa, pero el movimiento ha generado una gran polémica mediática. El ente público no ha sido del todo claro con el público con sus últimas decisiones, pero parece que tampoco lo ha sido con los implicados en el polémico programa.
El mensaje de la presentadora va más allá de una queja profesional. Quiere volver disfrutar de su trabajo, a equivocarse, a evolucionar sin la rigidez de un entorno que parece haberla asfixiado. María pide libertad para ser ella misma, y está claro que en el magacín de RTVE, no la ha encontrado.
Nadie sabe con certeza cuál es el siguiente paso para ella. Lo que sí ha dejado claro es que su prioridad no es aferrarse a formatos, sino recuperar su esencia. Quizá busque un nuevo tipo de formato, pero sobre todo, un cambio de cadena que le permita volver a sentirse bien. Y, sobre todo, libre en todos los sentidos.