Apenas queda tiempo y si nadie lo remedia este viernes Daniel, el hijo de once años de Juana Rivas, será entregado a su progenitor al que se juzgará en Italia en unas semanas por maltratarlo a él y a su hermano Gabriel durante años.
Ahora es Gabriel quien ha hablado y lo ha hecho a través de una carta dirigida a “cualquier autoridad competente en España”.
“Eran tan evidentes mis heridas”
“Soy Gabriel Arcuri Rivas, tengo 19 años. En 2017 me entregaron a Francesco. Tenía 11 años, la misma edad que tiene mi hermano ahora. No se defendieron mis derechos, no me escucharon y me entregaron a él. A partir de ahí fueron cinco años de abuso y de maltrato, hasta que tuve el valor de defenderme a los 16. Eran tan evidentes mis heridas cuando pedí ayuda que ya no podían esquivar la situación: Le quitaron mi custodia a Francesco y le obligaron a devolverme a mi casa, España”, explica el joven.
“Miente sobre mí. Lo mismo que ya hizo con mi madre”
“Ahora, 3 años después, él miente sobre mí. Lo mismo que ya hizo con mi madre. Pero la única verdad es que desde que cumplí 18 años lucho en los tribunales para salvar a Daniel. A ese hombre lo juzgarán en Italia en menos de dos meses por malos tratos continuados hacia nosotros durante años. Confío en que lo condenen porque la fiscalía aporta muchas pruebas irrefutables, necesitamos justicia.
Daniel desea ser escuchado aquí y ahora. Que atiendan su miedo sin coacciones. No permitan que lo seden y entreguen mañana, como hicieron conmigo hace 8 años. Escuchen a Daniel antes de que sea demasiado tarde. Atentamente, Gabriel Arcuri Rivas”.
Itziar Prats no entiende por qué entregan a Daniel
Además, en la carta Gabriel adjunta unas declaraciones de Itziar Prats, cuyas hijas Nerea y Martina fueron asesinadas por su expareja tras haber intentado evitar el acceso del progenitor a las pequeñas.
“Me causa absoluto estupor pensar cómo se puede sentir Daniel simplemente con pensar que tiene que volver con quien, según él mismo ha verbalizado, le ha amenazado de muerte y le agrede tanto física, como psicológicamente. Debemos priorizar el interés del menor y asegurar su integridad por encima de cualquier otra circunstancia. La vida de Daniel está en riesgo y ya tenemos suficientes antecedentes como para afirmar que es una realidad”.
“Las instituciones no pueden anteponer la figura paterna al bienestar del menor en ningún caso. Tengan en cuenta la opinión de Daniel por su integridad. Y la experiencia de su hermano Gabriel, que también ha sufrido esa misma violencia. Itziar Prats Fernández, madre de Nerea y Martina. Víctima de violencia vicaria y violencia institucional“, concluyen sus declaraciones.
Gabriel Arcuri Rivas concluye la carta con un: “escuchen y protejan a Daniel”.