La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha aprobado la oferta pública de adquisición de acciones (opa) de BBVA sobre el Sabadell tras horas de máxima confusión. La sala competente del regulador así lo ha decidido en la jornada de hoy, casi un año después de su lanzamiento, y lo hace a pesar de que el banco vasco había asumido una serie de condiciones. Unos requerimientos que el Gobierno podrá cambiar en el próximo mes y medio.
Casi un año después de que iniciase su análisis, la CNMC ha dado su veredicto por unanimidad con una serie de compromisos (‘remedies’ en la jerga) para garantizar la presencia de oficinas de Sabadell y el acceso a cajeros en zonas poco pobladas, con rentas bajas o con escasa competencia.
Esto implica que la operación pasa a fase 3 y será ahora analizada por el Gobierno. En primer lugar, el Ministerio de Economía tendrá 15 días para evaluarla y decidir si la eleva el Consejo de Ministros, que tendría, a su vez, 30 días para analizarla y decidir endurecer las condiciones por motivos distintos a los de la competencia.
En caso de que la OPA logre también la aprobación del Consejo de Ministros, el siguiente paso será la aprobación por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) del folleto de admisión y, posteriormente, la apertura del plazo de aceptación, lo que supone que la decisión pasará a estar ya en manos de los accionistas de Sabadell.