Aunque el paro juvenil ha bajado hasta el 19,1% —el valor más bajo desde 2007—, la emancipación de los jóvenes continúa encallándose hasta alcanzar la cifra más baja de la historia desde que se comenzaron a registrar datos hace casi 20 años (en 2006). Solo el 15,2% de los jóvenes menores de 30 años vive fuera del hogar familiar, un porcentaje excepcionalmente bajo que no hace más que confirmar una tendencia preocupante que atrapa a este segmento de la población debido al creciente precio de la vivienda y a los salarios insuficientes.
La conclusión del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España es que los menores de 25 años se hallan en una situación “crítica”, puesto que el precio medio del alquiler ya se sitúa en 1.080 euros mensuales (+11,6% interanual), lo cual significa que un joven trabajador debería destinar el 92,3% de su sueldo en el caso de querer vivir sin compañía.
Generación inquilina
La incapacidad para emanciparse es sencilla de describir: la subida de precios de los alquileres es más poderosa que el incremento de los salarios y así se perpetúa la llamada “generación inquilina”. Entre los pocos que consiguen salir del hogar familiar, la gran mayoría (57,9%) lo hace mediante un alquiler convirtiéndose el acceso a la propiedad privada en una circunstancia muy minoritaria.
Los datos muestran que las medidas no son suficientes, como llevamos tiempo insistiendo.
Es necesario que desde el Ministerio se lleven a cabo soluciones reales. Os esperamos para hablar de la reforma de un Bono Alquiler Joven que de verdad funcione. https://t.co/taeLxr1FUE
— Consejo de la Juventud de España (@_CJE_) August 12, 2025
El acceso a la propiedad, de hecho, refleja un panorama algo desolador, puesto que el precio medio de compraventa (197.210 euros) equivale a 14 años de salario juvenil, y la entrada necesaria para adquirir una vivienda (59.163 euros) supone cuatro años completos de sueldo.
La conclusión del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud es que la mejora de los indicadores laborales no está sirviendo para resolver el problema del acceso a la vivienda, ya que circunstancias como la precariedad, el sobreendeudamiento y el riesgo de pobreza solo hacen que agravarse.
Medidas para la emancipación
Desde el Consejo de la Juventud de España reclaman al Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana que abra un canal activo y periódico de seguimiento para evaluar la evolución de la situación juvenil y reformar aquellas políticas que no están funcionando. Y urgen, en concreto, medidas como la aplicación efectiva de la Ley por el Derecho a la Vivienda, la reforma del Bono Alquiler Joven para que llegue realmente a toda la población joven o la construcción de parque público de vivienda con un 40% destinado a juventud son imprescindibles para revertir esta tendencia.
El CJE sostiene que el acceso a una vivienda digna es un derecho básico y su vulneración repercute de forma transversal en todas las esferas de la vida juvenil, desde la salud mental hasta la capacidad de desarrollar un proyecto vital independiente. Por ello, urgen a que se garantice la participación directa de la juventud en el diseño y evaluación de todas las políticas públicas que le afecten para poder llegar a un cambio real.
Cifras de riesgo de pobreza
El problema económico va más allá de encontrar empleo: en 2024, el 30% de las personas jóvenes estaba en riesgo de pobreza o exclusión social, y casi 1 de cada 5 jóvenes con empleo (18,8%) seguía en esta situación, un porcentaje que ha aumentado respecto a 2009. Entre quienes están en paro, la cifra supera el 50%.
En cuanto al nivel educativo, más de 6 de cada 10 jóvenes han superado la educación obligatoria y un 29,8% ha cursado estudios superiores. Sin embargo, esta formación no garantiza condiciones de vida independientes: la tasa de paro entre jóvenes con estudios superiores (13,4%) es significativamente más baja que entre quienes solo tienen estudios primarios (42,3%), pero la dificultad para emanciparse persiste en ambos grupos debido a los costes de vivienda.