“Tres heroínas acaban de volver a Israel”, celebraban desde los platós de televisión de Israel. Las madres de Emily Damari (28), Romi Gonen (24) y Doron Steinbrecher (31) seguían juntas la emisión de Al Jazeera desde el teléfono de un oficial del ejército israelí. Pasadas las cuatro de la tarde, la hora prevista para la liberación de las tres primeras rehenes en el marco de la tregua pactada entre Israel y Hamás, sus hijas fueron entregadas por parte de milicianos islamistas a la Cruz Roja. Al anochecer, cruzaron en un convoy de furgonetas hacia territorio israelí.
“Bienvenidas a casa chicas, os estábamos esperando”, celebraron las masas concentradas en la “Plaza de los rehenes” de Tel Aviv. Entre lágrimas de emoción y abrazos, los congregados celebraron la liberación de las tres rehenes, aunque con sentimiento agridulce, ya que todavía quedan 94 israelíes en manos de Hamás. El domingo las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) también anunciaron el retorno del cadáver del soldado Oron Shaul en una operación especial, retenido por el grupo islamista desde 2014.

Niños palestinos ondean la bandera palestina mientras celebran el alto el fuego en Rafah, al sur de la Franja de Gaza, el 19 de enero de 2025.
Fue una jornada frenética en Israel y Gaza, ya que a primera hora del domingo la tregua no entró en vigor. Hamás retrasó la entrega del listado con el nombre de las rehenes, y el ejército israelí siguió bombardeando Gaza, en ataques que costaron 19 muertos según las autoridades sanitarias locales. Según reportes, Qatar presionó nuevamente a Hamás para desencallar la situación. Se prevén recurrentes giros de guión en la primera frase de la tregua, en que durante seis semanas serán liberados 33 rehenes a cambio de casi 2.000 presos palestinos.
Los momentos de la liberación fueron tensos. En Gaza, miles de civiles se agruparon junto al cruce de Netsarim, punto en que la Cruz Roja debía entregar a los rehenes a las fuerzas de seguridad israelíes. Los hombres armados de Hamás, que aprovecharon la atención mediática para demostrar fuerza y reivindicarse como la fuerza dominante en la franja, tuvieron que disparar al aire para abrir hueco al convoy humanitario. Poco después de las cuatro de la tarde, se publicó el titular soñado en Israel: “ya están de vuelta en casa”.
Reunited at last. pic.twitter.com/l91srqby5c
— Israel Defense Forces (@IDF) January 19, 2025
Tras ser montadas en helicópteros militares con sus madres, las tres liberadas fueron transportadas de inmediato al hospital Sheba en el centro del país, para chequear su estado físico y psicológico. Fueron ingresadas en el departamento infantil, para asegurar mayor privacidad y comodidad. Cientos de israelíes se concentraron en el exterior para darles la bienvenida.
En el estado judío se mezclaban sentimientos de euforia y frustración. Desde la tarima de la “Plaza de los rehenes”, la ex cautiva Ilana Gritzevsky, novia del rehén Matan Zangauker, recordó que “tenemos el corazón roto”, y prometió que “no pararemos hasta lograr el retorno de todos”. En la plaza cundía la desconfianza hacia el ejecutivo de Benjamin Netanyahu, ya que temen que la salida forzosa de la extrema derecha del gobierno derive en un retorno a la guerra. “El interés de Bibi es su supervivencia política, nosotros no le importamos”, lamentaban algunos presentes.
Desde Hamás, su portavoz Abu Obeida publicó un clip de homenaje a los “mártires” muertos en los últimos 15 meses, y enfatizó que “se debe contener al enemigo israelí” para hacer cumplir el acuerdo. “Se podría haber alcanzado la tregua un año antes”, consideró Obeida, que culpó a Netanyahu de alargar el proceso. Desde el gobierno israelí, acusaron reiteradamente a Hamás de incumplir lo pactado con los mediadores qataríes, egipcios y norteamericanos.

Una ambulancia traslada a los rehenes israelíes Romi Gonen, Emily Damari y Doron Steinbrecher tras su llegada en helicóptero militar al Centro Médico Sheba en Ramat Gan, Israel, el 19 de enero de 2025.
Romi Gonen, asistente del festival musical Nova, perdió a tres amigos en la matanza islamista. La capturaron e hirieron de un balazo en la mano cuando intentaba huir. “Mamá, estoy sangrando”, dijo en su última comunicación. Se localizó su teléfono en Gaza horas después. Rehenes liberados en 2023 contaron que seguía viva, pero su mano cambiaba de color por las heridas.
Emily Damari fue capturada junto a otros 37 residentes del “barrio de los jóvenes” del kibutz Kfar Aza. En el último mensaje enviado a su familia, alertó que terroristas de Hamás disparaban cerca suyo. Sufrió heridas mientras fue capturada y transportada a Gaza. En su kibbutz, decenas de vecinos celebraron eufóricamente su liberación.
A Doron Steinbrecher (31) la extrajeron de casa en pijama, cuando estaba encerrada en el refugio antibombas. En enero de 2024 se recibió la primera prueba de vida, cuando apareció en un video propagandístico de Hamás rogando por su liberación junto a otros dos rehenes.

La gente enciende bengalas mientras se reúne para celebrar el alto el fuego en Gaza, en Túnez, el 19 de enero de 2025.
Netanyahu consideró que la vuelta de Romi, Emily y Doron supone “un día increíble y emotivo, son las tres primeras rehenes que devolvemos en esta ronda”. Y añadió: “todos sabemos que sufrieron un infierno, pasan de la esclavitud a la libertad. Lo logramos gracias al sacrificio y valentía de nuestros valientes combatientes”.
Cuando las masas se dispersaron de la “Plaza de los rehenes”, un grupo de chicas aclaró: “gracias a Trump”. El reelecto líder estadounidense ha sido bendecido por el centroizquierda israelí, ya que consideran que logró imponer a “Bibi” un acuerdo para frenar la guerra de Gaza y permitir el retorno de los rehenes. Pese a la euforia parcial, el contador en la plaza sigue en marcha: mañana marcará 471 días. Ante una población exhausta, los familiares de los rehenes suplicaron a la población mayor presión popular, para impedir imprevistos en los próximos canjes.