Ferraz recibió una denuncia por acoso de una socialista en el exterior

Los casos de denuncias por acoso machista en el PSOE no sólo se ciñen al ámbito nacional. Según ha podido confirmar este medio con fuentes del partido, existe un nuevo caso de acoso a una mujer socialista, producido mientras trabajaba en el exterior, del que no detallan las circunstancias para no comprometer su confidencialidad. Dichas fuentes confirman que es un asunto que está “resuelto”, y que se se trató con discreción porque así lo pidió la denunciante.

Según detallan, la mujer puso en conocimiento de un compañero su situación, y éste contactó con Ferraz para informar del acoso que sufría la mujer y que se iniciara la investigación.

Denuncias con recorridos diferentes

Hay una evidencia que se desprende en el recorrido de las distintas denuncias que van saliendo a la luz. En el caso de la militante de Torremolinos, que presentó una denuncia el pasado mes de junio contra el ex secretario general socialista del municipio malagueño, el protocolo anti acoso sí se activó en el momento en que la denunciante se puso en manos del partido, pese a que fuentes del PSOE en Andalucía reconozcan que el proceso ha sido lento, y la mujer acudiera a la Fiscalía al ver que el partido no actuaba. Afirman que la lentitud de la investigación pudo poner en riesgo la integridad de la mujer, ya que tachan de intimidatorio el acoso de Navarro.

El testimonio de la mujer  en el extranjero también se atendió, mientras que las víctimas de Paco Salazar no corrieron la misma suerte. Eldiario.es publicó que las denuncias de las mujeres habían desaparecido de los canales internos del partido, y desde Ferraz se achacó a un error informático. Tras la publicación del medio, las denuncias volvieron a activarse y el protocolo anti acoso del PSOE se puso en contacto con ellas. Lo que implica que, cinco meses después de que estas mujeres acudieran a los canales que desde el partido se definen como “garantistas”, no hay indicios de que el partido hubiera iniciado los protocolos de actuación y las mujeres se encontraban sin la protección y asesoramiento que se les garantiza.

Este medio, además, tuvo acceso a los protocolos que se siguen desde Moncloa en casos de acoso -que no son los mismos que el partido-, a través de los que las mujeres afirmaron no atreverse a presentar sus denuncias al temer represalias. “Te quedas marcada”, aseguraban, ya que en caso de que la denunciante no esté conforme con el informe final, podrá acudir a miembros de la Abogacía del Estado o de la propia Presidencia para presentar su queja, lo que no les da sensación de seguridad.

Un caso que se quiso dejar morir

Este medio tuvo acceso a los chats internos de los militantes del partido, que mostraban su indignación por estos casos de acoso machista continuados dentro de un partido que se presenta como feminista. “Como mujer me avergüenzo. Hay que dar un golpe en la mesa”, eran algunos de los comentarios. “El caso Salazar es sonrojante, no se puede decir que no se ha hecho nada en cinco meses porque ha fallado la aplicación de las denuncias”.

La Secretaría de Igualdad del PSOE de Málaga, que dirige Yolanda Florido, emitió un comunicado que fue respaldado por 300 mujeres socialistas, entre otras, por históricas del socialismo malagueño como Marisa Bustinduy. Un documento que sigue recibiendo apoyos de toda la provincia andaluza y de distintos territorios del suelo español.

Alegría admite que la comida con Salazar fue un error

Pese a que no hay información respecto al estado de la investigación de las denunciantes de Salazar, este medio publicó a principios de noviembre una comida privada que mantuvo Alegría con el ex asesor de Sánchez en un restaurante madrileño. Un encuentro que se produjo a la vez que las víctimas no tenían información del estado de sus denuncias.