J.K. Rowling ha criticado públicamente y de forma directa a Emma Watson, a quien calificó de “ignorante”, tras las declaraciones conciliadoras que la actriz realizó la semana pasada asegurando que seguía “atesorando” su relación con la autora de Harry Potter, pese a sus enfrentamientos por la cuestión trans.
J. K. Rowling, de 60 años, publicó un texto de 600 palabras en X (antes Twitter) en el que rechazaba la postura de Emma Watson, de 35, quien en una entrevista con el podcaster Jay Shetty había expresado su deseo de mantener el afecto hacia personas con las que no comparte opiniones.
“Como otras personas que nunca han experimentado la vida adulta sin el colchón de la riqueza y la fama, Emma tiene tan poca experiencia de la vida real que es ignorante de su propia ignorancia”, escribió Rowling. “Los adultos no pueden pretender acercarse a un movimiento activista que llama con frecuencia al asesinato de un amigo, y luego reclamar el derecho al cariño de ese amigo como si se tratara de su madre”.
En esa entrevista, Emma Watson había señalado: “Es mi deseo más profundo que la gente que no está de acuerdo con mi opinión pueda seguir queriéndome. Espero poder seguir queriendo a quienes no necesariamente comparten mi punto de vista”.
J. K. Rowling recordó en su mensaje la polémica declaración de la actriz durante la gala de los BAFTA en 2022, cuando Emma Watson dijo estar “aquí por todas las brujas” (all the witches), interpretado entonces como una crítica velada a la autora. Según Rowling, ese gesto, acompañado después por una nota manuscrita de disculpa enviada a través de terceros, marcó un punto de inflexión.
“Las amenazas de muerte, violación y tortura contra mí estaban en su punto álgido. Había reforzado mi seguridad personal y vivía en constante preocupación por mi familia. Emma acababa de echar más gasolina al fuego públicamente y, aun así, pensó que una frase escrita en un papel bastaría para tranquilizarme sobre su simpatía y amabilidad”, señaló.
La escritora también acusó a la intérprete de Hermione Granger de haber cambiado de tono ahora solo porque “la condena absoluta hacia mí ya no está tan de moda como antes”. Y añadió: “Emma tiene todo el derecho a discrepar conmigo y a hablar de sus sentimientos en público. Pero yo también tengo ese derecho, y he decidido ejercerlo”.
En su extenso comunicado, Rowling insistió en que Emma Watson no comprende las consecuencias reales de las políticas que ha defendido en favor de los derechos trans, debido a su posición privilegiada. “Yo no era millonaria a los 14 años”, recordó. “Vivía en la pobreza mientras escribía el libro que hizo famosa a Emma. Por eso entiendo qué significa para mujeres y niñas sin privilegios la erosión de sus derechos, en la que Emma ha participado con tanto entusiasmo. Ella nunca necesitará un refugio para mujeres sin hogar. Nunca será ingresada en una sala hospitalaria mixta. Me sorprendería que haya estado en un probador de calle desde la infancia. Su ‘baño público’ es de uso individual y con un guardia de seguridad en la puerta”.
La disputa entre Rowling y Watson se arrastra desde hace varios años, cuando la actriz, junto a Daniel Radcliffe y Rupert Grint, se distanció públicamente de la autora tras sus comentarios sobre la identidad de género.