Indra apuesta por una fabricación y un diseño “100% españoles” en el desarrollo del contrato para la fabricación de los 32 nuevos vehículos lanzapuentes con los que se dotará al Ejército en el marco del aumento de los presupuesto militares nacionales, según han explicado a Europa Press fuentes de la compañía.
El plan de la empresa pasa por aprovechar sus nuevas capacidades productivas en Asturias (a finales de junio cerró la compra de El Tallerón a Duro Felguera por 3,6 millones de euros) e impulsar los corredores industriales definidos por el Gobierno, sobre todo los de la zona norte, la ruta de la plata y del Mediterráneo.
316M para vehículos lanzapuentes
Cabe recordar que esta misma semana el Ejecutivo autorizó la celebración de un contrato valorado en casi 316 millones de euros para adquirir vehículos lanzapuentes sobre ruedas para el Ejército de Tierra y que Indra recibió a mediados de octubre un préstamo estatal de 190 millones de euros a un tipo de interés del 0% para la prefinanciación de este programa de modernización militar.
No obstante, en las próximas semanas y antes de que acabe el año tendrá que dilucidarse el plan industrial para el desarrollo del programa, e Indra, como contratista principal, deberá establecer en qué empresas se apoya para sacar adelante el proyecto.

Oportunidad para España
Si bien desde la empresa no han dado más detalles sobre las posibles compañías que participarán en el proyecto, sí que han enfatizado que esta es una oportunidad para la industria española, dado que tan solo dos empresas alemanas fabrican este tipo de vehículos lanzapuentes, por lo que se abre la opción de que las firmas nacionales adquieran experiencia en este segmento de negocio.
De hecho, uno de los elementos en los que se hace hincapié desde la empresa es que la plantilla de Indra-Gijón (como se denomina a las capacidades productivas de El Tallerón) adquirirá, además de carga de trabajo para los próximos años, experiencia en el desarrollo de un producto que hasta ahora no se hacía en el país. En la práctica, y a pesar de que las aspiraciones de Indra pasan por un diseño y una fabricación 100% nacionales, se trata de un camión de 10 ruedas sobre el que se instala un sistema lanzapuentes. En ese sentido, la compañía estaría barajando como plataforma base del nuevo vehículo lanzapuentes las de Iveco y MAN, si bien este punto no ha sido confirmado por la empresa.
General Dynamics
La apuesta de Indra por el desarrollo de un vehículo lanzapuentes con diseño y fabricación “100% españoles” se produce en un contexto en el que General Dynamics European Land Systems (GDELS), la filial europea de la compañía norteamericana y propietaria de Santa Bárbara Sistemas, ha realizado diversos movimientos encaminados a formar parte de este contrato.

Como en las próximas semanas tendrá que dilucidarse el plan industrial para el desarrollo del programa, General Dynamics busca formar parte del proyecto y recibir parte de la carga de trabajo. Uno de los principales argumentos de la compañía es que su ausencia del contrato obligaría a Indra a tener que recurrir a “proveedores extranjeros”, cuando la idea principal es potenciar la industria nacional.
De hecho, esta misma semana General Dynamics ha condicionado su intención de abrir un centro productivo en Cataluña junto a Gutmar a que Indra la incluya en este contrato de modernización militar, denominado Vehículos Lanza Puentes VLP Ruedas. De este modo, la compañía supedita la concreción de su proyecto para abrir un centro de producción de sistemas lanzapuentes que aproveche las instalaciones de Gutmar en Sant Cugat del Vallés a su entrada en el contrato del lanzapuentes.
De hecho, cuando el Gobierno concedió la mencionada prefinanciación a mediados del mes pasado, la empresa afirmó su intención de negociar con Indra para participar en este programa.
Asimismo, considera que la oferta que planteó era mejor que la de Indra dado que, a su juicio, cumple “en mayor medida” con los “requisitos técnicos demandados por el Ministerio de Defensa” y garantiza capacidades industriales “inmediatas”, una propiedad intelectual europea y española y un desarrollo y fabricación nacional, “con suministradores españoles y mano de obra española”, según remarcó en un comunicado.
En medio de todo ello, el directo general de Santa Bárbara Sistemas, Alejandro Page, se reunió la semana pasada con el presidente de la Comisión de Defensa de Foment del Treball, Vicente Codes, para analizar de forma conjunta “la oportunidad del ciclo inversor de defensa para la industria catalana”.
En este encuentro, Page expuso el acuerdo que Santa Bárbara Sistemas tiene con Gutmar, la firma catalana de mecánica de alta precisión controlada por Lauria Partners y participada por Hyperion, el fondo de inversión en defensa creado, entre otros, por el exlíder del PP Pablo Casado.
En concreto, el acuerdo contempla el desarrollo conjunto de sistemas lanzapuentes de “fabricación nacional” en las instalaciones que tiene Gutmar en Cataluña si, finalmente, “la empresa adjudicataria” (en referencia a Indra) “opta por que el programa de lanzapuentes se desarrolle con tecnología española y se fabrique en España, en lugar de recurrir a proveedores extranjeros”.
“Esta decisión permitiría que, por primera vez, una empresa catalana participara de manera directa en un proyecto finalista en el ámbito de la defensa y la tecnología dual”, resaltó General Dynamics en un comunicado.
Apoyo a blindados 8×8 Dragón
El programa de lanzapuentes busca proveer al Ejército de 32 blindados de este tipo para apoyar a las unidades dotadas con los 8×8 Dragón, los vehículos militares que produce Tess Defence, la compañía controlada por Indra y participada también por GDELS, Escribano Mechanical & Engineering (EM&E) y Sapa Placencia. El programa incluirá, además de la fabricación de los mismos, el mantenimiento y la modernización de los vehículos.
El Gobierno considera que estos vehículos son “esenciales” para apoyar a las unidades de zapadores, que necesitan estar equipadas con unos medios específicos de franqueamiento para garantizar los apoyos, la movilidad y la protección a las unidades en territorio nacional y en zona de operaciones, así como para permitir el paso de recursos en beneficio de la población.


