En medio de una irregularidad de resultados del Real Madrid, el nombre de Caroline Weir ha resurgido con fuerza. La escocesa, que es una regular siempre en el once del conjunto blanco, es el motor emocional y futbolístico de un equipo que atraviesa baches deportivos y anímicos.
Con su visión privilegiada y su peso en el vestuario, la 10 está siendo la chispa dentro de un equipo que está buscando reencontrar su rumbo tanto en el torneo nacional e internacional.

Su liderazgo reluce cuando el equipo flaquea
Más allá de sus goles y su calidad técnica, Weir se está convirtiendo cada vez más en un referente emocional para el conjunto blanco.
Esa misma capacidad para liderar con el ejemplo fue clave en otros tramos de la temporada, algo que le va a tocar volver a hacer dada la necesidad de su equipo de volver a encontrar el rumbo.
Su carácter personal y la exigencia que se pone ella misma, podría contagiar al resto de la plantilla. Si el Madrid logra canalizar esa ambición colectiva, Weir podría marcar el arranque de una nueva etapa en la que el equipo no solo compita, sino que también aspire a títulos.
Signe Bruun, Misa Rodríguez, Caroline Weir y Maëlle Lakrar con la primera equipación del Real Madrid 2025/26. 🤩🤍 pic.twitter.com/ezbUQHQTiL
— Madrid Femenino Xtra (@madridfemxtra) June 6, 2025
Punto de inflexión para el proyecto merengue
La presión del conjunto blanco es tratar de meterse entre los primeros puestos de la liguilla, tienen 7 puntos de momento en la tabla general.
La derrota en Londres complica sus opciones, pero también abre un escenario para reconstruirse como equipo tanto en lo mental como en lo deportivo.
Weir, podría ser la pieza clave para guiar al equipo en esta fase crítica. Su influencia no se limita a su potencia ofensiva: su lectura táctica le permite ejercer un control importante en el mediocampo y las que la rodean.
La voz más dura
La escocesa no ocultó su frustración una vez finalizado el partido por la jornada 3 de la Champions, cuando cayeron . “Estoy decepcionada”, reconoció la centrocampista, consciente de que su golazo al borde del descanso no fue suficiente para inclinar la balanza.
A pesar de las merengues tuvo oportunidades para ampliar su ventaja, faltó eficacia: “Tuvimos algunas opciones de marcar … fuimos buenas en la transición, pero no supimos ser eficaces”. También lanzó una advertencia sobre la exigencia de jugar a alto nivel: “A estos niveles el margen es pequeño y si no eres consistente no ganas”.
A raiz de todo ello, enmarcó la necesidad de tener un mayor control en momentos clave: “Somos un equipo que genera peligro, con buenas jugadoras, pero perdemos el control del partido en determinados momentos”, comentó Weir en tono reflexivo.
Comentarios que realiza una de las pilares de equipo, en forma constructiva que busca la pronta mejoría de las suyas ya que, partidos de tal jerarquía contra rivales de primer nivel, son los que sirven para afianzar la confianza de tu equipo de aquí a final de temporada.


