El ministerio de Trabajo y los agentes sociales han llegado a un principio de acuerdo para conceder una nueva ayuda a las víctimas de violencia machista. Una cuantía que se equipare al nuevo subsidio por desempleo de 600 euros al mes durante medio año y que podrían recibir todas las mujeres víctimas de violencia de género durante un tiempo máximo de treinta meses. Según fuentes de la negociación, las mujeres que sufran esta situación tendrían derecho al subsidio sin necesidad de ninguna cotización previa y desde los 16 años en adelante. Aunque todavía quedan flecos por cerrar, ambos subsidios, el de las mujeres víctimas de violencia machista y el subsidio por desempleo serían iguales. La cuantía partiría del 95% del indicador de rentas múltiples, IPREM (570 euros), durante medio año y bajaría al 90% en los siguientes seis meses y al 80% el resto del tiempo hasta completar un máximo de 30 meses, es decir, dos años y medio.
“Creo que la mesa ha sido profundamente constructiva, los interlocutores han dado muestras de su compromiso y están los mimbres para un acuerdo inmediato”, ha recalcado el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey a la salida de la reunión. El Ministerio es optimista. Ha solicitado a los interlocutores sociales que valoren en sus órganos internos la propuesta y respondan pronto, incluida la CEOE, “no hay motivo para que la patronal no esté dentro”, ha dicho Pérez Rey.
Un paquete de medidas en el que figuran, además del nuevo subsidio por desempleo que será compatible con el empleo, otra novedad: una nueva fórmula en la que será compatible la prestación contributiva con un trabajo a partir del año de cobro. Que se pueda recibir el paro y trabajar a la vez, aunque en este punto habrá que estar atentos a la letra pequeña. “Los detalles de la compatibilidad no los voy a ahondar hasta hablar con los agentes sociales, pero será similar a lo que ocurre con el subsidio” ha señalado el secretario de Estado.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz asiste a la manifestación convocada por los dos grandes sindicatos, CCOO y UGT, este miércoles en Madrid, en un Primero de Mayo que tiene como lema ‘Por el pleno empleo: reducir jornada, mejorar salarios’.
Algunos asuntos se han quedado fuera. Los sindicatos no han conseguido que se actualice el IPREM, el indicador que se utiliza en España para determinar la cuantía de ciertos subsidios y ayudas sociales y que se mantiene en esos casi 600 euros al mes, sin muchas variaciones, desde hace veinte años. En 2014, el IPREM se situaba en los 460,50 euros mientras que por ejemplo el Salario Mínimo Interprofesional se ha duplicado en ese mismo tiempo hasta alcanzar los 1.134 euros mensuales.
Aún así, UGT y Comisiones Obrera están satisfechos. Cristina Estévez, negociadora de UGT, ha valorado positivamente la reunión. “En este periodo negociador se han podido recuperar propuestas del diálogo social. La cotización del 125% para los mayores de 52 años era esencial. Además, se vuelve a ampliar el número de beneficiarios a emigrantes retornados y víctimas de violencia de género”.
El Gobierno tiene prisa por sacarlo adelante. Bruselas aprieta. La Comisión Europea concedió una prórroga de dos meses para que España pudiera presentar un paquete de reformas que incluyera el nuevo subsidio por desempleo y el plazo finaliza el 20 de mayo, este mismo mes. De ello depende el desembolso del cuarto paquete de ayudas europeas que suponen 10.000 millones de euros. Así que el acuerdo, podría estar muy cerca.
