ARTE

Penélope Cruz y Johnny Depp disfrutan juntos de Madrid y el Guernica

La actriz ejerce de perfecta anfitriona para enseñarle su ciudad a su amigo del alma, con quien comparte ya su cuarta película como protagonistas

La pareja de actores, en el Museo Reina Sofía de Madrid

No hay alfombra roja ni flashes chirriando como grillos. Solo una mañana en Madrid, el cielo plano como una promesa cumplida, y dos personas que caminan tranquilas. Son Penélope Cruz y Johnny Depp. Ella, con paso firme y sonrisa discreta, él, con su aire de leyenda gótica que ha aprendido a pisar sin hacer ruido. Parecen turistas, pero el mundo les mira como quien escucha un eco que vuelve desde hace más de veinte años.

Están en el Museo Reina Sofía. Hay quien va por el aire acondicionado y hay quien va por el arte. Ellos lo hacen por ambas cosas, quizá también por la historia. Frente al Guernica de Picasso, los dos se detienen como si el cuadro les devolviera una escena ya vivida.

El motivo de la visita no es solo el arte -aunque ese sea el marco perfecto-, sino el rodaje de Day Drinker, su cuarto trabajo juntos; una película sobre un hombre que busca olvido en la bebida y encuentra peligro en una mujer. Ella, claro. Un thriller que comenzó en las Canarias y ahora se pasea por Madrid como si la ciudad también formara parte del reparto.

Llevan compartiendo escenas desde Blow, cuando ella solo sabía decir “I want to work with Johnny Depp” y acabó rodando con él más de lo que imaginaba. Luego vinieron los piratas, los trenes orientales y las declaraciones de gratitud en los tribunales más feroces del mundo.

En un momento de pausa, en un rincón del Reina Sofía, alguien les hace una foto. No es un paparazzi, es la historia quien captura el instante. El museo la sube a sus redes como quien cuelga en la nevera un dibujo de sus hijos. Orlando Bloom, amigo de ambos y testigo de aquellas mareas caribeñas, comenta con dos corazones rojos. No hacen falta más palabras.

Después se les ve en La Latina. Vermut, sombra, sol. Johnny con gafas y sombrero, Penélope con vestido claro. Parecen personajes salidos de una novela de verano:. Es un paseo, sí. Pero también un mensaje: el cine sigue, la vida también.

TAGS DE ESTA NOTICIA