Quedan apenas unas semanas para que la baliza V16 se convierta en el único dispositivo legal de preseñalización de peligro en las carreteras españolas, sustituyendo definitivamente a los tradicionales triángulos de emergencia. La cercanía de la fecha ha disparado las dudas entre los conductores. Especialmente, en lo relativo a posibles sanciones y controles policiales para comprobar si los vehículos llevan la baliza obligatoria.
Ante este escenario, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha querido lanzar un mensaje de calma. Su director, Pere Navarro, ha insistido en que el objetivo de la implantación de la baliza V16 no es recaudar ni sancionar, sino mejorar la seguridad vial y reducir los atropellos que se producen cuando los conductores bajan del coche para señalizar una avería.
¿Habrá controles
Pere Navarro ha sido claro al abordar una de las preguntas más repetidas en las últimas semanas: no se van a parar coches para comprobar si llevan la baliza V16. Según explicó el director de la DGT, la Policía actuará con “flexibilidad y razonabilidad” ante la entrada en vigor de este nuevo dispositivo, como ocurre con cualquier cambio normativo relevante.
Desde Tráfico insisten en que el foco no está puesto en la sanción, sino en que los conductores entiendan por qué la baliza V16 es más segura que los triángulos y adopten progresivamente su uso. La prioridad, recalcan, es evitar situaciones de riesgo en carretera. Sobre todo en vías rápidas y de alta circulación.
Otra de las grandes inquietudes gira en torno a la tecnología que incorpora la baliza V16. En particular, su sistema de geolocalización. La DGT ha querido despejar cualquier sospecha al respecto, subrayando que este dispositivo no sirve para identificar al conductor ni para rastrear movimientos personales.
La baliza V16 únicamente transmite la posición del vehículo detenido en el momento de la incidencia. La información enviada incluye un identificador técnico, pero no está vinculado a la identidad del conductor, a la matrícula del coche ni a ningún dato personal. El objetivo es exclusivamente informar a los sistemas de tráfico de que existe un vehículo inmovilizado en un punto concreto de la vía.
El papel de la Agencia Española de Protección de Datos
En este proceso también ha intervenido la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), que ha avalado el funcionamiento de la baliza V16. Según la AEPD, el sistema cumple con la normativa de protección de datos. A fin de cuentas, no requiere que el usuario facilite información personal al adquirir ni al utilizar el dispositivo.
La baliza V16 se limita a emitir una señal luminosa intermitente de color amarillo, visible en 360 grados durante al menos 30 minutos, y a comunicar la ubicación del vehículo averiado. No almacena trayectos, ni genera historiales, ni permite identificar al conductor en ningún caso.
Qué vehículos están obligados a llevar la baliza V16
La obligación de usar la baliza V16 alcanza a turismos, furgonetas, autobuses, camiones, vehículos mixtos y conjuntos de vehículos no especiales. En todos estos casos, será el único sistema válido de preseñalización de peligro cuando entre en vigor la normativa.
En el caso de las motocicletas, su uso no es obligatorio, pero sí recomendado por motivos de seguridad. La DGT considera que la baliza puede ser especialmente útil para los motoristas. Al fin y al cabo, permite señalizar una avería sin necesidad de colocarse en una posición peligrosa en la calzada.