Nuestro país cuenta con 38 universidades en la última edición del ranking QS World University 2025, lo que nos sitúa como uno de los que mayor presencia tiene en la lista. En ella, tres universidades de España están entre las 200 mejores. Sin embargo, ninguna de las tres atraviesa el umbral de las 150 mejor valoradas.
Las tres universidades de España entre las 200 mejores del mundo

España es uno de los países que más universidades tiene en el prestigioso ranking de QS. En concreto, es la décima que más centros de educación superior posee en ella, haciendo un total de 38. Las universidades presentes entre las 200 mejores según la lista son la Universidad de Barcelona (puesto 160), la Universidad Autónoma de Barcelona (172) y la Universidad Complutense Madrid (187).
Entre las posiciones 200 y 300, se hallan la Universidad Autónoma de Madrid (206), la Universidad de Navarra (262) y la Universidad Pompeu Fabra (265). El resto, se hayan repartidas en diferentes posiciones, a lo lago de una clasificación que recoge más de 1400 universidades. Las instituciones españolas debutantes este año en la clasificación son: la Universidad Europea de Madrid, la Universitat Jaume I de Castellón y la UCAM (Universidad Católica San Antonio de Murcia).
Si bien hay buenas noticias por el crecimiento del número de instituciones educativas en esta lista global, se apunta que el mayor problema que prueban estos resultados es la infrafinanciación para la investigación académica, especialmente en comparación con otros países europeos. Esto afecta a las citas, la reputación y los resultados finales en los índices de medición en los que se basa el ranking, como el networking o la innovación.
El futuro de las universidades españolas, bajo lupa
Algunas conclusiones sobre qué hacer para mejorar las posiciones de las universidades españolas son bastante claras. El futuro de lo académico debe pasar por el incremento de la inversión en ciencia e I+D, las cuales se llevan mayoritariamente en universidades.
También se debe impulsar la internacionalización de las universidades, cosa que algunas ya tratan de hacer y lo están consiguiendo. Pero el apoyo de las instituciones gubernamentales debe ser mayor, para atraer talento y no perderlo. Además de fomentar la movilidad académica e incrementar las colaboraciones globales, por supuesto.
Otros factores a mejorar en el panorama universitario español es ayudar a la visibilidad en la reputación, promover las publicaciones de alto impacto y buscar el posicionamiento estratégico. En pocas palabras, apostar por mejorar la notoriedad académica. Sin perder de vista, obviamente, a la empleabilidad tras completar los estudios universitarios. Es uno de los principales lastres de nuestras universidades en cuanto a factores tenidos en cuenta por QS, con porcentajes alarmantemente bajos.
Tener tres universidades de España entre las 200 mejores del mundo es una gran noticia. No obstante, falta saltar de la cantidad a la calidad de estas universidades. La falta de inversión en investigación, el escaso apoyo al impulso de la internacionalización (y su consecuente “fuga de cerebros” nacional), la creciente competencia global y la baja empleabilidad están dejando atrás a nuestras universidades frente a otros países. Hacen falta medidas oportunas para revertir esa situación de cara al futuro universitario inmediato de España.