El pasado miércoles 3 de diciembre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, junto a representantes del sector del automóvil, presentó un paquete de 25 medidas para impulsar la industria del motor de España: el Plan Auto 2030. La nueva iniciativa, que sustituye el actual Plan Moves III que vence el próximo 31 de diciembre, permitirá que la industria automovilística española, que representa el 10% del PIB, alcance un valor agregado bruto de 120.000 millones de euros de cara a 2030. Así lo destacó ayer la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac).
La cifra supondría un incremento de en torno al 40% respecto al valor agregado bruto actual, que asciende a 85.000 millones de euros. En este sentido, el presidente de Anfac, Josep María Recasens, subrayó durante el encuentro con los medios el potencial del plan para promover tanto la oferta como la demanda del sector.
La hoja de ruta busca reforzar la producción de vehículos, proteger la industria de componentes y fomentar la infraestructura de recarga, a la que se destinará un 20% del presupuesto total. Así, durante los próximos cinco años se movilizarán entre 35.000 y 40.000 millones de euros en inversión pública y privada. Asimismo, pretende mantener los 1,9 millones de empleos actuales y consolidar a España como segundo productor europeo, con 2,7 millones de vehículos fabricados anualmente, frente a los 2,4 millones actuales.

95% serán electrificados
Del total de vehículos que España planea producir en los próximos años, un 95% serán electrificados, es decir, eléctricos puros o híbridos enchufables. Sin embargo, actualmente más del 92% del valor que genera la industria automovilística en España -unos 79.000 millones de euros- depende de los coches tradicionales de combustión interna, como los de gasolina o diésel. Para Anfac, este es uno de los principales cambios que debe ponerse en marcha desde la propia industria y las autoridades. “Es una señal de alerta, porque si el mercado está virando al vehículo eléctrico, es importante que el sistema también sea capaz de transicionar a la misma velocidad. Si no lo hacemos, toda la cadena de valor está en riesgo de desaparecer”, advierte Recasens.
En el plano de la demanda, el plan incluye un programa de ayudas a la compra de vehículos electrificados y un impulso decisivo al despliegue nacional de infraestructuras de recarga, con el objetivo de fortalecer el mercado doméstico y cubrir las zonas donde la red aún no ha llegado. En este bloque se integra el Plan Auto+ 2026, dotado con 400 millones de euros. Este programa introducirá ayudas directas aplicadas en el punto de venta. Además, estará gestionado de forma centralizada por el Gobierno, a diferencia del Moves III actual, administrado por las comunidades autónomas.
1,3 millones de matriculaciones
En esta línea, Faconauto reclamó ayer en un encuentro con los medios la rápida activación del Plan Auto+ y su coordinación con el Plan Nacional de Renovación del Parque, siguiendo la Ley de Movilidad Sostenible. La patronal destacó que, por primera vez, España cuenta con un plan estratégico para avanzar hacia la descarbonización “sin dejar a nadie atrás”. Según la organización, la iniciativa permitiría que España alcanzase 1,3 millones de matriculaciones anuales en 2026, con un 33 % de los vehículos electrificados. Así, su presidenta, Marta Blázquez, ha defendido “el rigor y la coherencia que ha demostrado la política pública” en el sector del automóvil con la prórroga del plan Moves en 2025, al mismo tiempo que ha reivindicado que el 2026 “tiene que ser el año de la consolidación”.

En defensa de los incentivos, Faconauto reconoció también que sin el efecto combinado de estas medidas, el mercado en el presente ejercicio “habría perdido en torno a 120.000 operaciones” y cerrado el año en niveles muy similares a los de 2024.
Vehículos de segunda mano en máximos
Por su parte, la Asociación Nacional de Comerciantes de Vehículos (Ancove) ha valorado positivamente las mejoras del nuevo Plan Auto 2030 para la compra de coches y furgonetas eléctricas. La entidad destaca dos avances principales. La estabilidad que aporta una duración de cinco años y la simplificación en la gestión, al aplicarse la ayuda directamente como descuento en el momento de la compra.
Sin embargo, Ancove ha criticado que la iniciativa excluya a los vehículos electrificados de segunda mano de hasta cinco años. Un segmento que considera clave para democratizar el acceso a la movilidad eléctrica. “Con esta decisión, se deja fuera a muchos ciudadanos que, a pesar de las ayudas, no pueden acceder a un electrificado nuevo, dificultando el rejuvenecimiento del parque”, ha señalado su presidente, Eric Iglesias. La asociación recuerda que el mercado de ocasión vive un momento especialmente sensible. En números, el precio medio de los turismos usados subió en noviembre un 2,7% interanual, hasta los 13.305 euros. Un “máximo histórico” que presiona aún más a los compradores con menor capacidad adquisitiva.

El peso de los fabricantes chinos
Por otro lado, el empuje de los fabricantes chinos continúa ganando peso en el mercado electrificado español. La enseña Omoda & Jaecoo ha alcanzado las 30.000 matriculaciones en menos de dos años desde su llegada. Los primeros modelos de Omoda comenzaron a inscribirse en febrero de 2024 y los de Jaecoo, en septiembre del mismo año. Solo en 2025, el grupo suma ya 21.177 ventas, con 12.464 unidades de Omoda y un crecimiento acumulado del 80,8% hasta noviembre. Jaecoo, a su vez, ha disparado sus entregas un 1.009% gracias al tirón del Jaecoo 7, que concentra 8.053 de las 8.713 unidades comercializadas.
Pero hay otro gigante chino que acelera aún más sus previsiones: BYD. La marca estima cerrar 2025 con más de 27.000 unidades vendidas, más que quintuplicando las entregas del año anterior. Y prevé alcanzar las 70.000 matriculaciones en 2026. De lograrlo, se situaría en la parte alta del ranking español y entraría de lleno en la pugna con Volkswagen, Renault y Toyota.


