La situación de desempleo no impide acceder a la baja por enfermedad o accidente. Pero, ¿cómo afecta esto al cobro de la prestación por desempleo? La respuesta es clara: el SEPE continúa pagando.
La prestación no se detiene por estar de baja
Si una persona está en el paro y comienza una incapacidad temporal —ya sea por enfermedad común, accidente no laboral o laboral—, seguirá recibiendo el mismo importe mensual de su prestación por desempleo o subsidio, según el caso. El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) mantiene el abono mientras dure el derecho a percibir esa ayuda, sin reducir la cuantía ni suspender el pago por el hecho de estar de baja.
Durante este tiempo, además, el SEPE sigue cotizando a la Seguridad Social, lo que permite que el desempleado no pierda derechos en futuras prestaciones como la jubilación o la incapacidad permanente.
¿Se sigue gastando el paro?
Sí. Aunque la persona esté de baja médica, los días de prestación se consumen con normalidad, como si siguiera buscando trabajo activamente. La diferencia es que mientras se esté de baja, no será obligatorio renovar la demanda de empleo, ni participar en cursos, entrevistas o itinerarios de inserción laboral. Estas obligaciones quedan en pausa temporalmente.
Diferencias según el origen de la baja
El tratamiento que se da a la incapacidad temporal depende del tipo de contingencia:
- Contingencias comunes: Si la baja se debe a una enfermedad o accidente no laboral, el desempleado seguirá cobrando su paro hasta que se agote. Si la baja continúa después de consumir la prestación, deberá acudir al Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) para solicitar la ayuda por incapacidad.
- Contingencias profesionales: Si la baja tiene su origen en el último empleo (por ejemplo, un accidente laboral o enfermedad profesional previa al desempleo), el paro no se consume. En ese caso, se cobra la prestación por incapacidad temporal y, al finalizar la baja, se puede recuperar el derecho a paro no utilizado.
Cuando se agota el paro y aún se está de baja
Una de las dudas más comunes es qué sucede si la baja médica continúa una vez agotado el paro. Dependerá, de nuevo, del origen de la incapacidad:
- Si es por contingencias comunes, el SEPE deja de abonar la ayuda y el afectado debe gestionar su situación con el INSS, que se encargará del pago de la baja médica.
- En el caso de contingencias profesionales, el trabajador sigue cobrando la misma cantidad que recibía por paro, hasta que reciba el alta. Como no ha consumido días de desempleo, podrá reactivar su paro posteriormente.
También existe un caso especial: cuando la baja se considera una recaída de una incapacidad iniciada durante el último empleo. En estos supuestos, el afectado seguirá percibiendo la misma cuantía, incluso tras agotarse el paro, y sin que se le reduzca al 80% del IPREM.
¿Qué pasa después del alta médica?
Una vez el trabajador recibe el alta, puede solicitar el subsidio por desempleo si cumple los requisitos establecidos por el SEPE, como haber agotado la prestación contributiva o no disponer de ingresos suficientes.
En resumen, estar de baja médica mientras se cobra el paro no supone la pérdida del derecho a percibirlo, aunque sí afecta a cómo se gestiona y a qué organismo debe abonarlo en función de cada situación. Por eso, es clave conocer bien el tipo de contingencia y mantener informadas tanto al SEPE como a la Seguridad Social.