Castilla y León aún esconde un sinfín de tesoros por descubrir para el resto de España. Más allá de los destinos turísticos habituales en esta comunidades, tiene pequeños rincones que, a pesar de su tranquilidad, belleza y singularidad, logran mantenerse auténticos y fieles a sí mismos. Uno de estos lugares es una gran escapada familiar en Ávila.
El pueblo se halla en la Sierra de Gredos, y a primera vista, podría parecer uno más entre tantos. Sin embargo, aún conserva algo en su estado más puro: un excepcional pinar y un centro con patrimonio etnográfico ligado a la ganadería trashumante y la cultura pastoril.
Una escapada familiar en Ávila de lleno en la naturaleza
Hoyocasero es un municipio de montaña que se beneficia de un microclima particular, el cual ha permitido la supervivencia de una joya botánica de incalculable valor científico y ecológico: el Pinar de Hoyocasero. Este bosque lleno de varios ejemplares de pinos.
Cuenta con más de 500 especies de plantas, algunas únicas no sólo en la Península Ibérica, sino en todo el mundo. Además, la flora es también preciosa: las aguileñas, petunias, pulsatilas y los sotobosques embellecen aún más el paisaje de este bonito lugar. Por supuesto, también hay fauna en este paraje. Con suerte, se pueden ver corzos, jabalíes, águilas, búhos…
Su combinación de flora y fauna convierte al Pinar de Hoyocasero en un laboratorio natural, objeto de estudio para botánicos y ecologistas de todo el mundo.
Recorre el Pinar una senda bien adecuada y señalizada, que no tiene ninguna dificultad y se puede hacer con niños. Cuenta, también con área recreativa para niños.
Otras actividades de interés en Hoyocasero

Aunque el Pinar es la joya de la corona, Hoyocasero ofrece otros atractivos que complementan la visita de esta escapada familiar en Ávila. El pueblo en sí mismo mantiene la arquitectura tradicional de la sierra, con casas de piedra y tejados de teja, que invitan a pasear por sus tranquilas calles. Hay varios restos vetones y románicos, entre ellos un puente que cubre una zona donde los habitantes y visitantes disfrutan de un buen baño.
La Iglesia de San Juan, del siglo XV, es un punto de interés arquitectónico y cultural. Pero lo más llamativo es el Centro de Arte y Naturaleza del Cerro Gallinero. Un centro con diferentes figuras y expresiones artísticas sobre el paisaje donde toda la familia puede pasar un buen rato.
No se debe olvidar acercarse a los restaurantes, bares y alguna pastelería con dulces de la zona. Un buen plato con carne y un buen dulce para reponer fuerzas siempre viene bien.
Este pequeño pueblo abulense nos recuerda la riqueza oculta que a menudo reside en los rincones menos explorados de nuestro territorio. Visitar Hoyocasero es sumergirse en un ecosistema único, conectar con la historia y la naturaleza, y disfrutar de una escapada con la familia idónea para estas vacaciones.
Un destino que, sin duda, dejará una huella imborrable en toda la familia. La mayoría, repite, según indican muchas personas en Tripadvisor y en redes sociales.