Con las vacaciones a la vuelta de la esquina, quizá ya estés planeando una escapada para romper con la rutina. Si tu destino está en el Reino Unido, estás de suerte: sus costas ofrecen una sorprendente variedad de paisajes. Desde formaciones geológicas impresionantes hasta playas ideales para surfear, pasando por pintorescos pueblos llenos de arte y tradición. En esta guía, te presentamos cinco de las costas más destacadas del país, cada una con un encanto único y actividades que convertirán tu visita en una experiencia inolvidable.
1. Jurassic Coast
Reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la Jurassic Coast es un recorrido por millones de años de historia terrestre. ¿Cuántos? 185, para ser exactos. Sus imponentes acantilados y formaciones rocosas datan, en su mayoría, del período Jurásico —de ahí su nombre— aunque también incluyen rocas del Triásico y Cretáceo.
Estos, junto con los arcos de piedra como el emblemático Durdle Door, ofrecen un paisaje espectacular para los senderistas y amantes de la naturaleza. Además, es un lugar ideal para los curiosos que disfrutan buscando fósiles en sus playas de guijarros, conectando con un pasado prehistórico fascinante.

2. Cornwall
Cornwall destaca por su clima suave y sus aguas claras, lo que la convierte en uno de los destinos playeros favoritos del Reino Unido. Desde playas familiares hasta algunas de las mejores olas para surfear en Newquay, esta costa ofrece actividades para todos los gustos.
Además, no puedes irte de esta costa sin visitar el pintoresco pueblo de St Ives, un imán para los amantes del arte y la cultura, donde se encuentra una sucursal de la afamada Tate Gallery, que alberga pinturas y esculturas de numerosos artistas británicos del siglo XX. Y, por supuesto, no podrás marcharte sin probar la clásica empanada de Cornualles (Cornish pasty), hecha de harina de trigo y rellena de carne y verduras.

3. Pembrokeshire Coast
Esta costa salvaje y protegida forma parte de un Parque Nacional y ofrece uno de los paisajes más impresionantes de Gran Bretaña. El sendero de la costa de Pembrokeshire serpentea a lo largo de 186 millas, atravesando desde escarpados acantilados, hasta playas abiertas y sinuosos estuarios.
Aquí puedes disfrutar de relajantes paseos y observación de estrellas, o aventurarte en actividades llenas de adrenalina como el surf y el coasteering. Sus playas limpias, como Barafundle Bay, y la gran variedad de paisajes, arenas y especies raras convierten a este rincón del oeste de Gales en un destino espectacular para descubrir y conectar con la naturaleza.

4. Isle of Skye
Con paisajes dramáticos y escarpados, esta costa ofrece una belleza mística. Poco masificada y con una riqueza fotográfica inigualable, la isla también está impregnada de historia: desde fósiles de dinosaurios hasta batallas entre clanes, pasando por la huida del infame Bonnie Prince Charlie durante la Rebelión Jacobita.
En tu recorrido no deberían faltar los castillos del clan MacDonald y del clan MacLeod, especialmente si deseas conocer el legado cultural escocés en su propio territorio. Skye es un destino donde naturaleza e historia se entrelazan en cada rincón del paisaje.

5. Northumberland Coast
Para quienes buscan historia y serenidad, esta costa es un refugio menos turístico con un encanto especial. Castillos imponentes como Bamburgh, ruinas junto al mar y playas extensas y solitarias, invitan a paseos tranquilos y momentos de introspección. Su atmósfera pacífica y su belleza intacta la convierten en el lugar ideal para escapar del bullicio y reconectar con la calma del paisaje.
