José Luis Ábalos permanece en la prisión de Soto del Real mientras la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil reconstruye sus presuntos delitos y faltas. Delitos como los de cohecho, uso de información privilegiada, tráfico de influencias y malversación, y faltas como la de pinchar la luz en el chalé de La Alcaidesa (Cádiz) que, según los investigadores, la trama le proporcionó con la expectativa de que la empresa Villafuel, controlada por Claudio Rivas, obtuviera la licencia de operador mayorista de hidrocarburos.
Rivas, a través del comisionista Víctor de Aldama y el enlace Koldo García, compró la voluntad de Ábalos, entonces ministro de Transportes, para lograr esta licencia de operador.
Aldama fue quien inició las gestiones necesarias para la adquisición del citado chalé por valor de 585.000 euros, operación que quedó formalizada mediante protocolo notarial de compraventa el 10 de junio de 2021. Rivas, convencido de que obtendría la licencia, puso a disposición del ministro la referida propiedad el 17 de junio de 2021 y lo plasmó días después un contrato de arrendamiento instrumental que incluía una opción de compra.

El 27 de junio de 2021, Ábalos ya solicitó a Koldo que le consiguiera la escritura y el contrato de arrendamiento, pese a que este último se fechó y firmó con efecto desde el 1 de julio de 2021. El ministro disfrutó de la propiedad de forma continuada hasta el 26 de noviembre de 2021 (última fecha en la que se conoció que estuvo en ella).
Durante este tiempo no solo la disfrutó, sino que incluso intentó su aprovechamiento económico (con la idea de alquilarla a turistas), todo ello bajo la cobertura formal del mencionado arrendamiento instrumentalizado, cuyas cuotas no fueron satisfechas, con excepción de la primera mensualidad y la fianza.
La destitución de Ábalos
¿Por qué solo disfrutó del chalé hasta el 26 de noviembre de 2021? Porque Ábalos fue destituido como ministro de Transportes el 12 de julio de 2021, una circunstancia que la trama encajó como un revés, aunque los corruptores trataron de seguir durante algún tiempo con sus planes.
Sin embargo, transcurridos dos meses desde el cese del ministro y ante la falta de la licencia pretendida, Rivas ordenó a su abogado la redacción de una demanda de resolución de contrato de arrendamiento del chalé, de desahucio y de reclamación de rentas, cuyo borrador fue elaborado el 10 de septiembre de 2021 y finalmente firmado por el abogado el 10 de enero de 2022.

De las conversaciones mantenidas por el círculo de Rivas el 26 de noviembre de 2021 y siguientes se desprende que los dueños formales habrían dado la orden de da le baja la luz del chalé de La Alcaidesa.
Así se evidenció cuando Ábalos, que se había desplazado al lugar para pasar unos días, advirtió que no había luz en el chalé comentándoselo a Koldo. Este a su vez habló con Carmen Pano, una figura importante en la trama como correo de grandes cantidades de dinero en efectivo (hizo retiradas de sumas por un importe total de 108.500 euros de la cuenta de una mercantil a la que Rivas hizo una transferencia por esta cantidad).
Igualmente —reconstruye la UCO— se desprende de las conversaciones analizadas que el exministro Ábalos había dado la orden de “engancharse a la luz” ¡legalmente, advirtiendo luego que desengancharan antes de reanudar el servicio para evitar la multa.


