El presidente del gobierno, Pedro Sánchez, acudirá este miércoles a la sesión de control en el Congreso y responderá finalmente a preguntas de los grupos parlamentarios, tras aplazarse la conferencia de la ONU que se iba a celebrar la próxima semana en Nueva York y a la que tenía previsto asistir.
Así lo han confirmado a Efe fuentes parlamentarias, después de que el Gobierno se haya puesto en contacto con los grupos para informarles del cambio y para que aquellos que tengan cupo puedan presentar este lunes las preguntas dirigidas al jefe del Ejecutivo.
La sesión de control llega en un momento de alta tensión política tras el escándalo que ha salpicado al ya exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, implicado en el caso Koldo según un nuevo informe de la Unidad Central Operativa (UCO). Se espera, por tanto, un tono especialmente duro por parte de la oposición y una presión creciente por parte de los socios parlamentarios.
El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, elevó el tono el pasado jueves tras conocerse nuevas informaciones sobre Cerdán. “Empezaron robando en las primarias y no han parado desde entonces”, denunció. “Su modus operandi ha sido robar votos a sus compañeros, enriquecerse y mantenerse en el poder”.Feijóo criticó duramente a Sánchez por ir de “víctima” y pretender “sacudirse la responsabilidad”. A su entender, ya no debe haber un espacio de presentar una moción de censura, sino que debe “dimitir ya”. Así, afirmó que “cambiar a Cerdán por Ábalos no sirvió de nada; cambiar a Cerdán por otro tampoco servirá”. A su juicio, el presidente del Gobierno “no debe esperar a una moción de censura, debe dimitir ya”.
Choque con los socios de investidura
Las tensiones, sin embargo, no se limitan a la oposición. En el seno del propio bloque de investidura crecen las dudas sobre la estabilidad de la legislatura. La vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, advirtió que “no basta con pedir perdón” y reclamó “un nuevo marco de relaciones en el seno del Gobierno, basado en el respeto y el avance”, añadiendo que “no podemos continuar así”.
Por su parte, Junts per Catalunya ha solicitado una reunión urgente con Pedro Sánchez para “evaluar la viabilidad” de la legislatura, tras la salida de Santos Cerdán, figura clave en las negociaciones con el independentismo catalán. En la misma línea, el portavoz del PNV, Aitor Esteban, expresó su “sorpresa” ante la situación y reclamó más explicaciones por parte del Ejecutivo.
Desde ERC, la secretaria general, Alisenda Alamany, fue tajante: “Si se demuestra que no es un caso aislado, que esta corrupción está amparada y extendida y la conocía el presidente del Gobierno, es evidente que no podrá seguir contando con nuestro apoyo”.