La ciudad de Pamplona será testigo este miércoles del esperado regreso de Leire Martínez a los escenarios. Esta vez, sin el respaldo de La Oreja de Van Gogh. Pero con la misma fuerza escénica que la convirtió en una de las voces más queridas del pop español. Su actuación en la Plaza del Castillo, a las 23.45 horas, marca el inicio oficial de una nueva etapa en su carrera. Un proyecto en solitario más íntimo, emocional y conectado con su esencia artística.
Leire Martínez, quien durante más de una década lideró con éxito el mítico grupo donostiarra, vuelve a pisar fuerte el panorama musical nacional. Y lo hace desde la autenticidad y el deseo de reconectar con su voz más personal. Su primer single, Mi Nombre, estrenado en abril, ha sido recibido con entusiasmo por sus seguidores y ha marcado un punto de inflexión en su trayectoria.
De las multitudes al alma
Para Leire Martínez, este regreso supone más que una simple transición musical. Es una reafirmación de identidad. Alejada de las dinámicas de grupo, la cantante ha apostado por una propuesta que pone el foco en la honestidad, la emoción y el relato propio. Mi Nombre es un tema reivindicativo, cargado de intensidad, en el que Leire canaliza las emociones acumuladas durante una etapa vital que fue tan luminosa como turbulenta en su desenlace.
Según ha destacado el Ayuntamiento de Pamplona, esta nueva propuesta muestra la versatilidad y madurez interpretativa de Leire Martínez. La consolidas como una artista completa, capaz de evolucionar sin perder su esencia. El concierto de este miércoles no solo será una presentación musical, sino también un acto simbólico: el arranque de una nueva etapa con álbum y gira incluidos.
El regreso de Leire Martínez a Pamplona tiene un componente emocional evidente. En 2022, llenó la Plaza de los Fueros junto a La Oreja de Van Gogh. Ahora, tres años después, busca conquistar nuevamente al público navarro. Pero esta vez desde otro lugar: el de una artista que ha apostado por el riesgo de comenzar de nuevo y hacerlo desde la vulnerabilidad que solo da la libertad creativa.
La elección de la Plaza del Castillo como escenario no es casual. Se trata de un enclave simbólico en las fiestas de San Fermín, donde cada año se dan cita artistas de gran proyección nacional e internacional. Que Leire Martínez forme parte de ese cartel en solitario es una señal clara del reconocimiento que mantiene como figura imprescindible del pop español contemporáneo.
El mensaje detrás del single
Mi Nombre, el primer sencillo de esta nueva etapa, ha sido descrito por la propia artista como un estallido emocional. En él, Leire Martínez rompe con las etiquetas del pasado y abraza una estética sonora más cercana al pop alternativo, con pinceladas electrónicas y una estructura narrativa más personal.

El tema anticipa un álbum en el que la cantante se aleja de los grandes himnos de estadio para adentrarse en territorios más introspectivos y poéticos.
El público, que ha seguido su evolución con atención desde su incorporación a La Oreja de Van Gogh en 2008, ha reaccionado con entusiasmo a este cambio de rumbo. Las plataformas digitales han registrado miles de escuchas del nuevo tema. Y la expectativa ante su nuevo disco no deja de crecer. Leire Martínez, sin duda, ha sabido transformar el cierre de una etapa en el inicio de otra aún más prometedora.