Casa Decor celebra una doble efeméride que marca su solidez y relevancia en el panorama del diseño y la arquitectura interior en España: 60 ediciones y 33 años de historia. Y lo hace, como ya es costumbre, superando las expectativas. En esta ocasión, el edificio elegido para acoger esta última edición ha sido el señorial inmueble situado en Sagasta 33, un palacete de finales del siglo XIX que, con su elegancia atemporal y sus elementos originales, se convierte en el escenario perfecto para mostrar lo último en diseño, sostenibilidad y creatividad.
La historia de este edificio es un homenaje a la arquitectura clásica madrileña. Con una estructura que conserva sus suelos de madera originales, molduras, techos altos y balcones con forja tradicional, Sagasta 33 ofrece un lienzo cargado de carácter y alma que cada diseñador ha reinterpretado con una mirada contemporánea, sin borrar las huellas del pasado. Este diálogo entre la historia y la innovación ha sido, sin duda, uno de los grandes aciertos de esta edición.
Mis imprescindibles de esta edición
De entre las variadas propuestas, destacan para servidor dos espacios que no debemos pasar por alto, probablemente por su sencillez y, a la vez, brillantez en cuanto a mensaje y ejecución. El primero es el espacio de Roca, diseñado por Andreu Carulla (cuyo espacio ya me conquistó en la anterior edición), que ha sabido traducir los valores de la marca —funcionalidad, sostenibilidad y diseño— en un entorno que recuerda a un balneario contemporáneo. Carulla ha reinterpretado el concepto de baño como lugar de desconexión y descontextualización absoluta sumada al confort, jugando con materiales cálidos, formas orgánicas y una iluminación casi meditativa, donde dejar ver los secretos que esconde el magnífico edificio, mostrando su desnudez y demostrando que, tras un gran ejercicio de integración, muchas veces lo más bello está en lo original, las estructuras o en esa belleza inacabada que sale de la sistemática perfección que buscan la mayoría. Y es ahí, probablemente, donde radica la magia y la calma.
En segundo lugar, Geberit, un espacio creado con elegancia técnica por el premiado estudio Zooco de Santander, autores, entre otros proyectos, del restaurante del centro Botín, que ha apostado por una propuesta minimalista y muy arquitectónica, donde la tecnología invisible se convierte en protagonista silenciosa y donde demuestra con maestría que el pavés is the new black. Su integración perfecta con los mínimos elementos decorativos demuestra que el diseño funcional también puede emocionar y que, creativo y comercial no son términos contrarios.

Otro de los momentos más inspiradores de la visita es el trabajo de Sigfrido Serra pata TheMasie, un diseñador que ha sabido imprimir un carácter personal y colorido a su espacio. Aquí, Quideva ha intervenido de manera impecable en la rehabilitación de los suelos, aportando un acabado cálido y moderno que contrasta con los elementos patrimoniales del edificio.

Al entrar, el visitante es recibido por el espacio Aritco, ideado por Borja Esteras, que logra una primera impresión acogedora, anticipando lo que está por venir en el recorrido.
Menciones a destacar
Hay muchas firmas y creativos que merecen una mención especial. No puedo olvidarme de Cupa Stone, por ejemplo, que una vez más ha sabido elevar la piedra natural a una dimensión casi escultórica, aportando textura, solidez y valor estético a cada uno de los espacios en los que ha intervenido. Por su parte, Formica vuelve a demostrar su versatilidad, mostrando aplicaciones innovadoras y sorprendentes en revestimientos y mobiliario.

La madera cobra protagonismo gracias al trabajo artesanal de los ebanistas de Fucking Wood, cuya precisión y sensibilidad en cada pieza demuestran que el diseño de autor sigue más vivo que nunca. Y las paredes con textura de Ecoclay —hechas con arcillas naturales— aportan no solo un aspecto visualmente enriquecedor a muchos espacios, sino también beneficios en términos de sostenibilidad y confort.
No puedo dejar de mencionar el descubrimiento que ha supuesto para mí la empresa Creavalo, especializada en materiales de aislamiento reciclados y con aplicaciones transversales. Su propuesta es un soplo de aire fresco y les auguro un futuro prometedor en un sector que necesita urgentemente soluciones como las suyas. Podréis encontrarlo en varios espacios, destacando su presencia en el magnífico y elegante espacio de Bang & Olufsen ideado por José Lara.

Un evento imprescindible, estratégico y trascendental
Casa Decor no es simplemente una exposición de interiores; es un punto de encuentro clave para el sector, una plataforma donde diseñadores, marcas, arquitectos y amantes del diseño se dan la mano en un ambiente de creatividad, profesionalidad e innovación.
Con aforo completo prácticamente todos los días, ha demostrado ser no solo una cita imprescindible para el público, sino un enclave estratégico para grandes alianzas empresariales y colaboraciones creativas.
Desde aquí, mi más sincera felicitación a todo el equipo de Casa Decor por esta edición magistral. Porque más allá de los espacios, los materiales y las tendencias, lo que hace grande a este evento es su capacidad para emocionar, inspirar, así como su capacidad para seguir reinventándose edición tras edición, sin perder su esencia. Enhorabuena, Alicia, Kersty, Macarena… y a todo el grandísimo equipo que hay detrás por hacerlo posible un año más. Larga vida a CasaDecor.