Cuando España cayó eliminada en el Mundial de Catar 2022, en octavos de final y a manos de Marruecos, entre la prensa deportiva española cundió la desazón pero, eso sí, quedaba un consuelo: atizar a su máximo responsable deportivo, Luis Enrique Martínez, por el decepcionante papel del equipo, que comenzó con una victoria por goleada, continuó con un empate y siguió con una derrota como preludio al desastre final.
Tras la conquista de la Champions League ante el Inter, vuelve a cundir la desazón: el PSG, con Luis Enrique a los mandos, es el gran triunfador de la temporada en Europa. La gran diferencia es que ahora no hay consuelo.
A estas alturas, todos sabemos por qué Luis Enrique cae mal a un amplio sector de la prensa. Y los primeros motivos no hay que buscarlos en los periodistas sino en él mismo, que a lo largo de su carrera ha sido borde y maleducado de serie, con o sin motivo, tratando igual a quien le planteaba una memez que al que le hacía una pregunta procedente. Para explicar la fobia no podemos obviar que Lucho es un icono culé y, aún más fuerte, un madridista renegado, pero no sobrevaloremos este factor: la prensa que más lo ha padecido es la que sigue al Barça.
En todo este torrente de animadversión, lo más divertido quizá es que se le atice por moderno. Como en España la prensa deportiva se renueva menos que el Poder Judicial, algunos de los que lo hacen son los mismos que, cuando Luis Enrique jugaba al fútbol, ridiculizaban a su entrenador, Louis van Gaal, por tomar notas en una libreta durante los partidos. ¡Qué se había creído ese holandés! El colmo de la excentricidad, al parecer.
Tal es la obsesión con Luis Enrique que, en pleno éxtasis por la victoria en la Eurocopa 2024, el primer pensamiento de Manolo Lama fue para él, un navajazo disfrazado de elogio a Luis de la Fuente: “No come huevos duros, no tiene Twitch, no monta en bicicleta, no tiene andamio…”, exclamó en la Cope.
Tenía que salir a relucir el Twitch, por supuesto. Eso nunca lo superarán. Podrían haberlo vendido como una iniciativa pionera y no se habrían equivocado, pero prefirieron denostarlo como una frikada. No soportaban que el mismo tipo que ponía cara de vinagre a sus preguntas se transformara en una persona jovial que respondía con naturalidad a cualquier chorrada de los aficionados.
Lo último, tras la final del sábado en Múnich, ha sido escalar a conflicto diplomático su inofensivo comentario a Susana Guasch en Movistar+. “Vengo por Mónica [Marchante], ya lo sabéis”, dijo al llegar a la entrevista a pie de campo. “Por Alvarito [Benito] menos y por ti… poco”, añadió en alusión a la presentadora. Un comentario espontáneo que el habitual corporativismo ha transformado en una declaración de guerra. Al fin, un mínimo consuelo, una rendija por la que poder pegarle.
Luis Enrique says ” I’m only here for you ( Mónica Marchante – in purple ), for you .well, not so much ( the male presenter ), and not for you at all” to ( Susana Guasch, a staunch Espanyolista/Madridista – in white ).
Gotta love his honesty and balls. pic.twitter.com/dm69OIEjfC
— MetaFootballTV⚽ (@ChrisMetaTV) June 1, 2025
Este lunes, en su programa ‘Buenas noches y buenos goles’ de Radio Marca, Felipe del Campo convirtió la improvisación de Luis Enrique en una “soflama revanchista”, que es justo lo que entonó él. “Luis Enrique buscó el careo con su enemigo preferido: el periodista deportivo. Aquel que tuvo un respeto reverencial de once meses en su desgracia familiar y que el sábado recibió una nueva coz para ganarse likes en el estiércol Twittero. Twich Enrique [sic] sabe perder pero no sabe ganar”. Nunca superarán lo del Twitch.
😡 El editorial de @felipedelcampo
“@sguasch tiene más mérito con sus 20 años de presentadora que Luis Enrique con sus 2 @ChampionsLeague ”
📻 https://t.co/ilgsizI4uT pic.twitter.com/XuFMMEZNXd
— Radio MARCA (@RadioMARCA) June 2, 2025
Tras tratar de ningunear a Luis Enrique como futbolista y seleccionador —de manera innecesaria, sobre todo lo primero—, Del Campo destrozó el corporativismómetro: “No supo ganar con una enorme periodista que lleva presentando deportes veinte años en televisión siendo mujer, algo bastante más meritorio que dos Champions en el PSG de los mil millones en fichajes en una década y en el Barça de la MSN”. En Artículo14 nos encantan los alegatos feministas, aunque esta comparación, la verdad, me está costando un poco entenderla.