Alerta en el PP porque Vox “encarezca el precio” de su apoyo más allá de Extremadura

La tensión entre el Partido Popular y Vox es enorme en plena campaña de las elecciones en Extremadura. Los cargos consultados por Artículo14 creen que Santiago Abascal “no va de farol” cuando amaga con exigir la renuncia de María Guardiola para llegar a algún tipo de pacto tras las urnas, extremo que Alberto Núñez Feijóo no está dispuesto a asumir. Y se extiende la preocupación de que esa guerra en Extremadura tenga consecuencias en las comunidades que también abrirán las urnas el próximo año.

Tal y como avanzó en exclusiva este periódico, Jorge Azcón será el siguiente en enfrentarse a unas elecciones. El presidente de Aragón prevé adelantar a Alfonso Fernández-Mañueco y convocar el próximo mes de febrero, por lo que esta misma semana anunciará la decisión. “Vamos para elecciones, no hay ninguna señal por parte de Vox de que vaya a favorecer la aprobación de los Presupuestos”, resumen las fuentes consultadas.

El giro de este mismo lunes por parte de la ministra portavoz y candidata del PSOE en Aragón, Pilar Alegría, ofreciéndose para apoyar el techo de gasto y evitar así el adelanto electoral, no hace más que a Azcón que confirmarse en sus posiciones. “Es una trampa muy evidente, quieren ganar tiempo”, explican en su entorno a este diario. Y es que una convocatoria electoral anticipada supondría una salida acelerada de Alegría de Moncloa, en un momento en el que las encuestas en el territorio vaticinan una caída de entre 5 y 6 escaños para los socialistas. “Están muertos de miedo”, aseguran las fuentes consultadas que creen que las urnas serían “terroríficas” para el PSOE.

Cascada de elecciones

Así, el calendario electoral sería el siguiente. Superado el trance en la Comunidad Valenciana, con un pacto discreto entre el PP y Vox para evitar el adelanto tras la caída de Carlos Mazón, Extremadura abrirá el ciclo electoral el 21 de diciembre y, tras ella, vendrían Aragón, Castilla y León y Andalucía, por dicho orden. Y los barones de estas regiones están muy pendientes de lo que acontece en el territorio que gobierna Guardiola y temen que el choque total con Vox les pueda perjudicar.

En esencia, lo que preocupa en el Partido Popular es que un Vox muy fuerte endurezca sus condiciones postelectorales, y no solo en Extremadura. “Que vendan más caro su apoyo”, como el propio Abascal ya ha verbalizado de cara a los comicios del 21 de diciembre. “Si la señora Guardiola no es capaz de alcanzar un acuerdo con Vox que suponga un cambio de rumbo, pues el PP tendrá que decidir si pone a otro candidato”, dijo Abascal, rompiendo en añicos a campaña.

Así, el miedo en el PP aumenta por partida doble. Primero, por la fuerza de Vox según las encuestas y, segundo, por “los imposibles” que pueda reclamar una vez cerrada las urnas. Así lo reconocen en privado los cargos de distintas estructuras consultadas por Artículo14, aunque también precisan que “les puede perjudicar pasarse de frenada”. “¿Van a abocar a nuevas elecciones por no entenderse con el PP?”, se pregunta incrédulo un diputado nacional.

Repetición electoral ante el chantaje

Precisamente, la respuesta oficial y pública al órdago de Vox ha sido alinearse con Guardiola y dejar claro que no temen una repetición electoral en Extremadura. Alberto Núñez Feijóo, en los corrillos por el Día de la Constitución, advertía de que Vox estaba jugando a “cosas peligrosas” e incluso le culpabilizaba de buscar “el bloqueo” ya en campaña electoral. En ningún caso se plantea la opción de forzar la renuncia de Guardiola, tal y como ha publicado Artículo14.

“Si hay que forzar elecciones se fuerzan”, resumen varios presidentes consultados. “No hay que ceder ante máximos”, repiten al unísono. El cierre de fila en torno a Guardiola es unánime, a pesar de las repercusiones que pudiera tener en el resto de territorios.

Juanma Moreno o Isabel Díaz Ayuso, barones de referencia del PP, no dudaron en pronunciarse en términos parecidos, rechazando las amenazas de Abascal. Y, en los citados corrillos del Congreso el pasado sábado, trataron de mantener la calma, asegurando que el globo de Vox no es tan grande como apuntan las encuestas.

“En campaña electoral siempre están muy disparados y luego no pasa tanto cuando llegan las elecciones”, coincidieron varios presidentes autonómicos, en conversación informal con este periódico. De hecho, señalan que el “error” de Vox es el de creerse que se va a “comer al PP”. “Eso no va a pasar”, aseguran.

Mensajes de autoprotección mientras que en el PP sigue sin dar con la fórmula exacta para frenar a Vox. “Lo hemos estudiado, con sociólogos y de todo”, desvelan las fuentes consultadas. Pero no dan con la tecla. En los últimos días, dirigentes populares señalan al PSOE como responsable. “Han engordado al monstruo”, aseguran, utilizando el argumento de “la pinza” que ya ha esgrimido Feijóo en alguna ocasión.