Los retrasos en las segundas pruebas diagnósticas de cáncer de mama en casos no concluyentes es la crisis más severa a la que se enfrenta Juanma Moreno, el barón de barones del PP, desde que ganó las elecciones en Andalucía, y llega en la recta final de la legislatura.
El propio presidente de la Junta de Andalucía se ha involucrado desde que se conocieron los fallos en los cribados. Ayer aseguró que el Servicio Andaluz de Salud (SAS), dependiente de la Consejería de Salud y Consumo, trabaja a “contrarreloj” para solventar los retrasos en la realización de segundas pruebas diagnósticas. Precisamente, ya había anunciado el viernes de un plan de choque y un cambio de protocolo de cáncer de mama para “perfeccionarlo”.
Juanma Moreno volvió a pedir disculpas a las afectadas y aseguró haber recibido información “muy tarde” sobre por qué “los sistemas de información han fallado y no han llegado”. Así lo reconoció durante la inauguración del centro de salud de Piedras Redondas, en Almería, al que acudió sin la consejera de Salud, Rocío Hernández. Desde allí defendió la “rapidez” con la que la Junta está actuando una vez tuvo conocimiento del problema.
Habla el presidente andaluz de la auditoría que ya hay en marcha sobre el cribado con el objetivo de encontrar el error y subsanarlo. Será después cuando, dijo, al identificar el problema y ver quien está detrás de la responsabilidad, se decida cómo “depurar responsabilidades”.
Un pronunciamiento con el que el presidente autonómico vira respecto a su decisión inicial. Artículo14 ya publicó que la intención de Moreno es la de mantener en el cargo a su consejera de Salud, Rocío Hernández, que sigue en el alambre. Esta premisa sigue de momento vigente, tal y como ha podido saber este diario. “Puede ser un funcionario, un director general…”, explican las fuentes consultadas.
Si bien, en privado, las críticas hacia la consejera se suceden. De hecho, algunos miembros de la dirección nacional del PP creen que la consejera debería ser cesada. “El problema es que tienen el miedo en el cuerpo, no sólo esas 2.000 mujeres, sino todas las que se han hecho una mamografía en los tres últimos años”, reflexionan desde el Comité Ejecutivo Nacional.
Moreno confía en que de esta crisis se consiga que el sistema de salud salga “sin lugar a dudas, más reforzado”.