El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) pregunta cada tres meses por los ministros y ministras del Gobierno con el propósito de averiguar el grado de conocimiento que tienen y también la puntuación que merecen de la ciudadanía. Los últimos datos son muy recientes, puesto que en el último barómetro del CIS de este mes de abril volvió a recogerse información demoscópica en este sentido, y resulta inevitable fijarse en los datos de María Jesús Montero y de Pilar Alegría, las grandes favoritas a tomar el relevo de Pedro Sánchez en el caso de que este lunes renuncie a la presidencia del Gobierno.
La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, es la figura de mayor peso político en el Gobierno a continuación del presidente. Por tanto, no es extraño que sea de las más conocida (un 85% de los encuestados sabe quién es). Únicamente la superan en notoriedad dos compañeros del Gabinete: la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz (95,4%) y el ministro del Interior, Fernando Marlaska (87%). A Montero le sigue de cerca la titular de Defensa, Margarita Robles (81%). En cambio, la ministra de Educación y portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, no destaca precisamente en notoriedad puesto que solo un 46,7% la identifica y es la décima en este ranking de conocimiento de los miembros del Consejo de Ministros.
Sin embargo, hay otros datos del CIS que también vale la pena observar y es el de puntuación que conceden los encuestados. A Montero la puntuaron con una media de 4,14 sobre 10 puntos y es, de hecho, una de las que peor nota saca, puesto que solo supera a cuatro ministros: el del Interior, Fernando Marlaska (3,69); el de Política Territorial, Ángel Víctor Torres (3,85); el de Transportes, Óscar Puente (3,89); y el de Presidencia y Justica, Félix Bolaños (4,08). Alegría, en cambio, obtiene un 4,53 y es la quinta mejor valorada por detrás de los titulares de Transición Ecológica, Teresa Ribera (4,56); Derechos Sociales, Pablo Bustinduy (4,66); Economía, Carlos Cuerpo (4,73); y Defensa, Margarita Robles (5,06).
A la luz de estos datos, la conclusión demoscópica es que quien combina mejor las variables de notoriedad y puntuación es, sin duda alguna, la veterana Margarita Robles. Pero nada hace sospechar que vaya a ser ella la escogida en caso de que Sánchez escriba su epitafio en Moncloa este lunes.
¿Toma ventaja, por tanto, Alegría respecto a Montero a la vista de los datos del CIS? El politólogo Marc Guinjoan se muestra muy escéptico al respecto de ese interrogante. "Con un nivel de conocimiento más elevado es mucho más sencillo obtener una puntuación más baja porque no solo te valoran tus votantes (que te suelen conocer más), sino también los votantes de los adversarios. Por eso la puntuación no se puede valorar de manera aislada, sino que hay que cruzarla con otras variables para obtener conclusiones útiles", explica. A partir de este análisis, por tanto, debería relativizarse que Alegría sea la quinta ministra mejor valorada con un 4,53.
Y en este punto, Guinjoan añade una consideración que, a su juicio, es igual de importante: "En realidad, hay un aspecto que es crucial y es conocer la valoración que hacen los electores de un partido respecto a determinada figura política". Es decir, que sería crucial en un presunto dilema entre Montero y Alegría conocer la opinión de los votantes del PSOE y no tanto la opinión del resto de electores, particularmente de los que están más alejados de los socialistas.