Alberto Núñez Feijóo no quiere precipitarse. De momento, no tiene en sus planes registrar una moción de censura contra Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados. ¿El motivo? No tiene asegurados los números para que salga adelante. “Si quieren acabar con esto, que me llamen”, trasladó a los socios parlamentarios del PSOE, que de no se dan por aludidos. Si bien, un sector del partido le aprieta para que dé el paso. “Se puede ganar simbólicamente”, sostienen en privado.
El jefe de la oposición tiene varias cartas que jugar en su ofensiva contra el presidente, al que ya califica de “mafia”. Y, de momento, apuesta por retomar la movilización en las calles. Por sorpresa, Feijóo protagonizó este miércoles una declaración institucional sin preguntas en las que su gran titular fue la convocatoria de una concentración el próximo domingo ocho de junio, que se celebrará a las once de la mañana en la plaza de España de Madrid.
El objetivo de Génova es que la participación sea masiva, la más numerosa de las protestas convocadas hasta la fecha por Feijóo. Y de ahí que haya dado orden a sus estructuras territoriales para que se movilicen, fletando autobuses desde sus territorios. Según ha podido saber Artículo14, la mayoría de los líderes territoriales ya han confirmado su asistencia el 8-J. Entre los asistentes estará Carlos Mazón, el president de la Comunidad Valenciana. “Claro que acudirá”, avanzan desde su equipo.
Así, Feijóo quiere llenar las calles de la capital antes de plantearse próximos movimientos en las Cortes Generales. Ya sea en el Congreso o en el Senado. En la primera de las Cámaras, el líder de los populares nunca ha descartado públicamente presentar una moción de censura, pero a priori le gustaría tener atados los apoyos necesarios. Y la aritmética parlamentaria, pese a la presunta corrupción que rodea a Sánchez, sigue inalterable. El líder popular tan sólo tendría asegurados los votos de la extrema derecha. “No nos ha llamado ninguno de sus socios para comunicarnos su decisión de retirarle su respaldo”, reconocen fuentes de Génova.
En el equipo de Feijóo interpretan que dar ese paso conlleva muchos riesgos. ¿El principal? “La frustración de ver el panel de votaciones y comprobar que Sánchez continúa siendo presidente”, explican las fuentes consultadas. Pero el debate se ha reabierto pese a que el líder del PP se adelantaba en su comparecencia pública advirtiendo de que ni Junts ni el PNV parecen dispuestos a cruzar esa línea.
“Depende de cómo la plantee y cómo se haga. Si se hace bien, puede ser un éxito”, razona un presidente autonómico. “La gente en la calle nos pide que hagamos más, que intentemos todo lo que esté en nuestra mano y la moción es un herramienta que está ahí”, añade otro alto cargo del PP. En la Comunidad de Madrid, la Comunidad Valenciana o la Región de Murcia entre otras regiones se escuchan voces que defienden ese “golpe político”.
La discusión también se vive en el seno del grupo parlamentario en el Congreso, en los márgenes de las reuniones formales. “Todos quedarían retratados. Es el trampolín perfecto de cara a los procesos electorales que están por llegar”, opina un diputado. “Hoy Sánchez no puede ofrecer ni un balance ni un proyecto… ni tan siquiera tiene Presupuestos. Lo único que podría es meter miedo con Vox pero cada vez le funciona menos”, añade otro. Son varios los que se preguntan “con qué cuajo defenderá” el PNV a Sánchez.
Hay en todo caso otro sector del PP que entiende la prudencia de Feijóo y se muestran escépticos. Por ejemplo, en Andalucía, uno de los territorios más próximos al líder gallego. “Presentar la moción uniría más al bloque de Sánchez”, augura un presidente autonómico. “Las mociones fallidas son una pérdida de tiempo, sólo la presentará si tiene apoyos”, añade otro líder territorial.
La posición de Génova la esbozó Ester Muñoz solo un día antes de la comparecencia de Feijóo en una entrevista con este periódico: “No estamos cerrados a nada pero en estos momentos no tenemos una mayoría para conseguirla”. Esto es, no cierra la puerta, pero descarta hacerlo ahora.
Otra de las cartas de Feijóo es la de citar a Sánchez en la comisión de investigación en el Senado, tal y como se comprometió hace ya meses en sede parlamentaria. Si bien, el equipo de Alicia García no ha recibido todavía aunque sus portavoces aseguran que finalmente acabará produciéndose. Cabe recordar que los populares tienen previsto mantener viva esa comisión lo que resta de legislatura, por lo que hay margen para hacerlo. “Sánchez vendrá, pero todavía es pronto para llamarle”, aseguran.
“La trama de corrupción saldrá de la Moncloa cuando de ella salga Sánchez. Y no encontrará cortafuegos posible”, proclamó Feijóo en su breve intervención en la sede nacional. El mandato del presidente “está en fase terminal porque no da más de sí”, aseguró. Y llamó a la movilización: “Podemos llenar las calles de la capital de España a la espera de hacerlo en las urnas para rechazar a un Gobierno que ataca a los jueces, que persigue a la Guardia Civil, a los periodistas y que ha urdido una trama de corrupción para servirse de lo que es de todos”.