Los mayores factores de riesgo cardiovascular en mujeres

Conocer cuáles son los factores de riesgo cardiovascular en mujeres puede ser clave para evitar correr peligros a medio y largo plazo

Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en mujeres a nivel mundial, superando a otros conocidos asesinos como el cáncer. Sin embargo, a pesar de la gravedad y prevalencia de estas enfermedades, muchos de sus factores de riesgo son evitables con cambios de estilo de vida y decisiones informadas. Así pues, repasemos los mayores factores de riesgo cardiovascular en mujeres. Así podrás evitarlos para no correr riesgos innecesarios.

A diferencia de los hombres, las mujeres tienen patrones únicos y desafiantes en relación con las enfermedades cardiovasculares. Los síntomas pueden ser menos reconocibles y los riesgos, muchas veces subestimados tanto por pacientes como por médicos. Los factores de riesgo también pueden variar significativamente en comparación con los hombres, haciendo vital una perspectiva de género en la prevención y tratamiento. Pero ¿cuáles son los factores de riesgo cardiovascular en mujeres? ¿Qué debes conocer realmente sobre esta cuestión?

Factores de riesgo únicos y comunes en las mujeres

Los mayores factores de riesgo cardiovascular en mujeres que puedes evitar

La salud de las mujeres tiene factores exclusivos frente a los hombres (Kilo y Cuarto)

Aquí van unos cuantos factores de riesgo cardiovascular que son excepcionales para las mujeres:

  • Hipertensión: La presión arterial alta es un factor de riesgo significativo para el desarrollo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. En mujeres, el riesgo de hipertensión aumenta con la edad, especialmente después de la menopausia, debido a cambios hormonales. Mantener una vigilancia regular sobre los niveles de presión arterial y adoptar una dieta baja en sodio y rica en frutas y verduras puede ayudar en su control.
  • Diabetes: La diabetes aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares de forma más pronunciada en mujeres que en hombres. Esto se debe en parte a que las mujeres con diabetes tienden a tener otros factores de riesgo, como obesidad y altos niveles de colesterol. Controlar la glucemia mediante dieta, ejercicio y medicación adecuada es crucial.
  • Obesidad y sobrepeso: La obesidad está fuertemente vinculada con enfermedades cardíacas. En mujeres, la distribución de la grasa corporal juega un rol crucial, siendo la acumulación de grasa en el área abdominal un indicador significativo de riesgo cardiovascular. Adoptar un estilo de vida activo y una dieta equilibrada son esenciales para mantener un peso saludable.
  • Síndrome metabólico: Este término se refiere a un conjunto de condiciones que incluyen presión arterial alta, altos niveles de azúcar en la sangre, exceso de grasa corporal alrededor de la cintura y niveles anormales de colesterol o triglicéridos. El síndrome metabólico es más común en mujeres, especialmente después de la menopausia, y aumenta considerablemente el riesgo de enfermedad cardíaca.
  • Fumar: Fumar tabaco es un importante factor de riesgo cardiovascular que es completamente evitable. En mujeres, fumar no solo aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas, sino que también puede adelantar la menopausia y aumentar complicaciones si se combinan con anticonceptivos orales.
  • Estrés y salud mental: El estrés prolongado puede contribuir a la alta presión arterial y otros problemas de salud cardiovascular. En mujeres, hay evidencia que sugiere que el estrés y la depresión afectan al corazón más que en hombres. Estrategias de manejo del estrés, como la meditación, el ejercicio regular y la terapia psicológica, son recomendables.

Por otro lado, aunque no es modificable, conocer el historial familiar de enfermedad cardiovascular puede proporcionar información crucial para la evaluación del riesgo personal. Aquellas mujeres con un historial familiar fuerte de enfermedades del corazón deben considerar evaluaciones de salud regulares.

La menopausia y el riesgo cardiovascular

La menopausia es un factor de riesgo único en mujeres. Los niveles de estrógeno, que se cree que tienen un efecto protector sobre el forro de las arterias del corazón, disminuyen significativamente durante este periodo. Esto puede resultar en un aumento de varios factores de riesgo cardiovascular. La terapia de reemplazo hormonal (TRH) ha sido objeto de debate, pero puede ser beneficiosa para algunas mujeres. Siempre y cuando se realice bajo estricta supervisión médica.

Prevención y concienciación frente a los factores de riesgo cardiovascular en mujeres

La prevención de las enfermedades cardiovasculares en mujeres no solo incluye la modificación de los factores de riesgo a través de cambios en el estilo de vida, sino también una educación adecuada y un enfoque proactivo en la salud cardiovascular desde una edad temprana. Campañas de concienciación pública específicamente dirigidas a mujeres pueden ayudar a cambiar la percepción y mejorar la prevención de estas enfermedades.

Implementación de estrategias de prevención:

  1. Educación sanitaria: Ampliar la educación sobre los síntomas y riesgos únicos de las enfermedades cardiovasculares en mujeres.
  2. Chequeos regulares: Fomentar exámenes regulares que incluyan pruebas de colesterol, presión arterial y glucemia.
  3. Programas de ejercicio: Incentivar la participación en programas de ejercicio físico, adaptados a diferentes edades y capacidades.