Cultura

SACRIFICIOS Y SALVACIÓN

El Tierra de Nadie de ‘Supervivientes: All Stars’ deja unos ‘sacrificios’ y una salvación

El último Tierra de Nadie de Supervivientes: All Stars dejó unas sesiones de peluquería radical y salvó a una concursante de la nominación

Recta final en ‘Supervivientes: All Stars’: expulsada, nominados y un récord en el último Conexión Honduras

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Los concursantes durante el Tierra de Nadie del 21 de octubre
Mediaset España
Actualizado: h
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El séptimo Tierra de Nadie de la temporada de Supervivientes: All Stars ha estado marcado por un punto de inflexión: la mesa de las tentaciones. Los concursantes tuvieron que hacer varios sacrificios, relacionados principalmente con su estética, con tal de conseguir unas tentadoras recompensas.

También se produjo la salvación de uno de los nominados. Asimismo, el recientemente expulsado Iván González visitó el plató del programa. Contó que había vivido la experiencia con mucha emoción y que estaba muy emocionado.

Los “sacrificios” de los participantes de Supervivientes: All Stars

El Tierra de Nadie del martes 21 de octubre ha supuesto el despliegue de la mesa de las tentaciones en Honduras. Habitualmente, se demandan a los participantes cortes de pelo a cambio de recompensas, principalmente comidas a las que no tienen acceso de manera habitual. En esta ocasión, hubo más que eso.

Las chicas, Jessica Bueno, Adara Molinero y Miri Pérez-Cabrero, accedieron a pasar por peluquería. Algunas, un poco más atrevidas que otras.

Miri se llevo probablemente el corte más radical de todos. Laura Madrueño le cortó 30 centímetros de cabello, a cambio de una hamburguesa y dos trozos de tarta. El programa le ofreció hablar con su padre a cambio de cortar 10 centímetros más, pero la concursante no quiso cortarse tanto su melena.

Con las mismas lágrimas que la anterior, Jessica aceptó un corte de 25 centímetros a cambio de una hamburguesa. Sollozando, Bueno dijo que “menos mal que no me puedo ver en un espejo”, y que sus hijos no le iban a reconocer. Pero desde el plató le aseguraron que su nuevo look no le quedaba nada mal.

Finalmente, tras rechazar hablar con su novio y quemar un objeto personal a cambio de un bocadillo, Adara sacrificó 10 centímetros de pelo por otro bocadillo y un trozo de tarta.

Por parte de los chicos, Tony Spina aceptó una rapada con cresta, una depilación con cera de sus axilas y llevar taparrabos a cambio de dos platos de pasta carbonara.

Carlos, quien ya llevaba 6 años con la misma barba, dijo que sí a quitarse esta y su bigote por una fuente de nuggets y patatas fritas con ketchup. Aunque la cosa no quedó ahí, ya que le ofrecieron una hamburguesa y una llamada con su mujer, y entonces aceptó que también le cortasen el pelo al cero. 

Faltaría Rubén, pero el tiempo corría en contra del programa y no pudo afrontar ninguna tentación. Por lo tanto, será el jueves cuando el nominado tenga que hacer frente a la mesa de las tentaciones.

Una salvación de cara a la gran final

Tras los sacrificios y recompensas, los tres nominados de la semana en Supervivientes: All Stars se colocaron bajo la plataforma de barro.

Rubén Torres, Carlos Alba y Miri Pérez-Cabrero aguardaron la decisión final tras el voto de la audiencia. Tras volcarse el barro sobre Carlos y Rubén, se reveló que Miri era la concursante salvada.

Esta se alegró muchísimo, y dio las gracias a sus amigos, familiares y al público que le votó. Todo esto, frente a la resignación de los dos nominados restantes.

Mañana jueves conoceremos quién de los dos es el que debe abandonar el concurso de supervivencia de Telecinco.

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