El próximo 1 de julio entrará en vigor un nuevo permiso retribuido para funcionarios que marcará un antes y un después en la vida de muchas familias. El Gobierno de España, a través del Ministerio de Función Pública, ha acordado con los sindicatos que integran la Mesa General de la Administración General del Estado (AGE) la aplicación de una medida largamente demandada. Un permiso específico para el cuidado de menores afectados por cáncer u otras enfermedades graves que requieran atención constante.
Este permiso retribuido para funcionarios se articula como un desarrollo reglamentario del artículo 49.e del Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP) y se materializará mediante un Real Decreto. Su puesta en marcha responde a una necesidad social urgente: permitir a madres, padres o tutores legales atender a sus hijos gravemente enfermos sin renunciar a sus derechos laborales ni sufrir una pérdida de ingresos.
¿En qué consiste este nuevo permiso retribuido para funcionarios?
El nuevo permiso retribuido para funcionarios contempla una reducción de jornada del 50% para aquellos empleados públicos que tengan a su cargo un menor afectado por una enfermedad grave, incluida la oncológica. Esta reducción podrá ampliarse en función de las necesidades del menor y de la valoración del servicio médico, hasta acumularse en jornadas completas si así se requiere.
La medida, que se aplicará inicialmente durante un periodo de tres meses, es prorrogable por bloques de dos meses mientras persistan las condiciones clínicas del menor. Esto permite una mayor flexibilidad y continuidad en el acompañamiento del paciente infantil. Algo crucial en procesos médicos largos y delicados.
¿A quién va dirigido el permiso?

El nuevo permiso retribuido para funcionarios está dirigido al personal funcionario de la Administración General del Estado que ostente la condición de progenitor, guardador con fines de adopción o acogedor permanente del menor afectado. La administración reconoce así no solo a los padres biológicos, sino también a quienes desempeñan una labor de cuidado legal y efectiva.
Para solicitar el permiso, será necesario aportar documentación médica oficial que acredite la gravedad de la enfermedad del menor y la necesidad de una atención continua, directa y permanente. Además, el funcionario deberá presentar una solicitud ante su unidad de personal, conforme a lo que se establezca en el reglamento que se publicará próximamente.
Un derecho ya previsto en la ley, pero ahora garantizado
Aunque el artículo 49.e del EBEP ya contemplaba la posibilidad de establecer este tipo de reducciones retribuidas, hasta ahora no existía un desarrollo normativo claro que garantizara su aplicación efectiva en la AGE. Con la aprobación del Real Decreto que regula este nuevo permiso retribuido para funcionarios, se da un paso decisivo para convertir este derecho en una realidad.
El acuerdo alcanzado entre Gobierno y sindicatos ha sido recibido con satisfacción por las organizaciones sindicales. Estas consideran que este tipo de permisos son fundamentales para mejorar la conciliación de la vida laboral y familiar en casos de extrema vulnerabilidad. El texto final del decreto aún no ha sido publicado. Sin embargo, se prevé que entre en vigor a partir del próximo mes, una vez superados los trámites reglamentarios.