La primera dama francesa, Brigitte Macron, se encuentra en el centro de una controversia nacional luego de que se difundiera un video en el que se le escucha referirse a un grupo de activistas feministas como “malditas idiotas”.
La grabación, publicada por el medio de farándula Public, muestra a Macron en los bastidores del teatro Folies Bergère en París, tras un espectáculo del humorista Ary Abittan, quien fue acusado de violación en 2021, aunque el caso fue archivado definitivamente a inicios de este año por falta de pruebas suficientes.
“Las vamos a echar a patadas”
El episodio ocurrió después de que un grupo de militantes del colectivo feminista #NousToutes interrumpiera la función del sábado pasado. Las activistas, que portaban máscaras con la imagen de Abittan y la palabra “violador”, gritaron consignas como “Abittan violador” para denunciar lo que consideraban una “campaña de comunicación destinada a presentarlo como una víctima traumatizada mientras se humilla a la denunciante”.
En el video divulgado por Public, Abittan, visiblemente nervioso antes de subir al escenario, le dice a Brigitte Macron: “Tengo miedo”. La primera dama intenta tranquilizarlo respondiendo: “Si salen unas malditas idiotas, las vamos a echar a patadas”, comentario que rápidamente desató críticas en todo el espectro político y social francés.

Ary Abittan, de 51 años, retomó su carrera tras la decisión judicial que desestimó la denuncia por violación presentada en su contra. Aunque la investigación concluyó que la denunciante había sufrido estrés postraumático, los jueces determinaron que no existían elementos suficientes para probar que el encuentro sexual había sido forzado. Abittan siempre ha sostenido que la relación fue consensuada.
El regreso del comediante a los escenarios, sin embargo, ha estado marcado por protestas feministas que consideran su reintegración una afrenta a las víctimas de violencia sexual.
Reacciones
Las declaraciones de Brigitte Macron provocaron una ola de condenas desde distintos sectores. Marine Tondelier, líder de los ecologistas franceses, calificó el comentario de “extremadamente grave”, mientras que la senadora conservadora Agnès Evren lo describió como “muy sexista”. Desde el propio campo presidencial, Prisca Thévenot, diputada y ex portavoz del Gobierno, reconoció que las palabras de Macron fueron “poco elegantes”.
El expresidente François Hollande también se pronunció al respecto, afirmando que “cuando se trata de mujeres que luchan contra la violencia hacia las mujeres, no se habla de esa manera”. La actriz Judith Godrèche, figura destacada del movimiento contra la violencia sexual en la industria cinematográfica francesa, escribió en Instagram: “Yo también soy una maldita idiota. Y apoyo a todas las demás”.

“Una crítica al método radical”
Ante la magnitud de la polémica, el entorno de Brigitte Macron emitió una aclaración a través de la agencia AFP. En el comunicado se señala que las palabras de la primera dama debían entenderse como “una crítica al método radical utilizado por aquellas que interrumpieron y obstaculizaron el espectáculo de Ary Abittan”, y no como un ataque a las feministas en general.
No obstante, figuras de la izquierda como Sarah Legrain, diputada de La Francia Insumisa (LFI), consideraron inaceptable la explicación. En redes sociales, Legrain denunció que “la primera dama insulta a las feministas movilizadas” y subrayó que “el archivo de una causa no borra la voz ni la baja médica de una mujer”.
Mientras el Palacio del Elíseo intenta contener la polémica, la opinión pública francesa continúa agitada por quienes consideran que las palabras de la primera dama reflejan una falta de empatía hacia las víctimas de agresión sexual.


